El Presidente de la República, Benemérito General Juan
Vicente Gómez y el doctor Rafael Requena, Secretario de la Presidencia.
El Dr. Rafael Requena contó con
el apoyo incondicional del Presidente de la República, Benemérito General Juan
Vicente Gómez, quien se mostró muy interesado en sus actividades arqueológicas,
tanto así que su libro "Vestigios de la Atlántida" fue dedicado a su
mecenas, el Presidente Gómez.
En 1930 se reinician los
trabajos arqueológicos patrocinados por el Dr. Rafael Requena, quien se
interesa en los montículos que rodean al Lago de Valencia. Los resultados de
tales investigaciones son publicados en su libro "Vestigios de la
Atlántida". Es Requena quien invita al país a tres arqueólogos
norteamericanos para que realicen investigaciones, lo que da lugar a los
primeros trabajos sistemáticos en nuestra arqueología en la década 1930-1940.
Los arqueólogos invitados por Requena son: Wendell Bennet (1932), Cornelius
Osgood (1933), Edward W. Berry (1933) y Alfred Kidder (1933-1934). Estas investigaciones señalan la
existencia de nuevos sitios arqueológicos e introducen el uso de la estrategia
métrica, ya desarrollada en la década anterior en el sureste de los Estados
Unidos. La obra de Kidder merece especial mención, ya que constituye el primer
intento de explicar el poblamiento precolombino de Venezuela.
El primer tratamiento museológico en Venezuela sobre
los objetos arqueológicos del lago de Valencia se lo debemos al impulso del doctor
Rafael Requena, al conformar una colección compuesta por más
de tres mil objetos, producto de las excavaciones realizadas en el lago de
Valencia, apoyadas por el Presidente de la República, Benemérito General Juan
Vicente Gómez y publicadas con el nombre de "Vestigios de la Atlántida",
pues creía que los hallazgos del lago de Valencia estaban vinculados con la
ciudad perdida. En 1935 decidió donar dos mil piezas de su colección al Museo
de Ciencias Naturales.
CONFERENCIA DEL DOCTOR RAFAEL REQUENA
En el Salón de Actos de la Escuela de Artes Plásticas dictará esta noche
una conferencia el señor doctor Rafael Requena, Secretario de la Presidencia de
la República del Benemérito General Juan Vicente Gómez y notable hombre de Ciencias.
El tema de tan interesante disertación versará acerca de los importantes
descubrimientos arqueológicos y etnológicos hechos por el doctor Requena en los
alrededores de la Laguna de Valencia, los cuales, a juzgar por las opiniones de
eminentes personalidades, son de trascendental importancia para el estudio y
conocimiento de nuestro pasado precolombino.
Mucho agradecemos al señor doctor Requena la invitación que ha tenido la
gentileza de hacernos para su conferencia y desde luego le auguramos con ella
un nuevo triunfo para su brillante personalidad científica.
(Publicado en la revista "Élite", el 9 de julio de
1932).
El señor doctor Rafael Requena, Secretario del
Presidente de la República, Benemérito General Juan Vicente Gómez, y el doctor
Wendell C. Bennett, en "Los Cerritos".
En diversas ocasiones nos hemos ocupado con el interés que el caso
requiere, del valioso tesoro arqueológico descubierto por el señor doctor
Rafael Requena en el Lago de Tacarigua, así como del importante Museo que, gracias
a su amor por esta rama de la ciencia, ha formado el doctor Requena en su
residencia de Maracay.
Hoy nos es grato reproducir los conceptos emitidos por el distinguido
hombre de ciencia doctor Wendell C. Bennett, con motivo de su partida para el
Norte.
Señaló el doctor Bennett:
"Después de un mes de cuidadosos estudios, inclusive la excavación
de un Cerrito y un minucioso análisis de la colección del doctor Rafael
Requena, quiero hacer la siguiente declaración: Considero este campo de
importancia mayor, no solo en la pre-historia de Venezuela, sino también en la
historia de la América. Más aún: considero el trabajo y la colección del doctor
Requena como una trascendental contribución al mundo científico. Esta
declaración no es del individuo al amigo a quien admira, sino del hombre de
ciencia al hombre de ciencia".
Wendell C. Bennett.
(Publicado en la revista "Billiken", el 15 de octubre
de 1932).
Sobre el trabajo arqueológico del doctor Rafael Requena en la cuenca del Lago de
Valencia, Wendell C. Bennett opinaba que:
"Debería seguir dedicándole con la
misma devoción(…), a la sombra y amplia protección que le presta el señor
Presidente de la República General Juan Vicente Gómez. El respetable hombre de
ciencia doctor Requena ha abierto el camino, y con su generoso espíritu ha
invitado a que se discuta con toda libertad doctrinas e hipótesis por él
formuladas…" (Bennett, 1932).
Según el propio Requena, refiriéndose al General Juan
Vicente Gómez, señaló: "A nadie le puede sorprender que el formidable constructor de
la Venezuela moderna, sea también un apasionado admirador de la Venezuela
prehistórica (…) tratándose de estudios que pudieran dar alguna luz sobre
nuestra prehistoria ¿quién mejor que él para servirme de mecenas en las
investigaciones arqueológicas?…" (Requena, 1932).
(Extraído del Libro "De la Arqueología en Venezuela y de las
Colecciones Arqueológicas Venezolanas. Propuesta para la construcción de la Red
de Museos de Historia de Venezuela", escrito por Lino Meneses Pacheco y
Gladys Gordones Rojas, publicado en Caracas, Venezuela, el año 2009).
El eminente doctor Rafael Requena, pionero de la investigación del período
arcaico en Venezuela y autor del libro "Vestigios de la Atlántida", publicado en 1932.
REQUENA, Rafael. Año 1932
"Vestigios de la Atlántida".
Tipografía Americana, Caracas.
La importante obra "Vestigios de la Atlántida" del doctor Rafael Requena, contiene 327 páginas con muchas fotos en blanco y negro y 1 un mapa plegable.
Se consigue en la Biblioteca "Pedro Manuel Arcaya". Cota 8960 Caracas.
CAPÍTULOS
Capt. I Información de la Tierra.
Capt. II Atlántida.
Capt. III Los Atlantes.
Capt. IV
Capt. V Etnología precolombina de Venezuela.
Capt. VI El Lago de Tacarigua.
Capt. VII Los Cerritos.
CONCLUSIONES
Diario de excavaciones arqueológicas practicadas en Los Cerritos del Valle de Tacarigua pp. 269-302 Catálogo: Inventario de las
colecciones etnológicas del Museo de Prehistoria procedentes de las
excavaciones practicadas en "Los Cerritos" del Valle de Tacarigua.
La magnífica obra, presenta hipótesis y conjeturas sobre los vestigios de la antigua
Atlántida en tierras venezolanas, basadas en sus observaciones y el compendio
de muestras arqueológicas recolectadas especialmente en la zona norte de los
estados Aragua y Carabobo y de manera particular en los alrededores del Lago de
Valencia o Lago de Tacarigua. El Dr. Rafael Requena contó con el apoyo
incondicional del Presidente de la República, Benemérito General Juan Vicente
Gómez, quien se mostró muy interesado en sus actividades arqueológicas, tanto
así que su libro fue dedicado a su mecenas, el Presidente Gómez.
Un aspecto del lago de Valencia o Tacarigua, en las cercanías de la
ciudad de Maracay. Foto: A. Muller.
El doctor Rafael Requena González, nació en Carúpano, Estado Sucre, el
24 de octubre de 1879. Se destacó como médico, arqueólogo aficionado,
diplomático y político. Hijo de Feliciano Requena y de Epifanía González Mayz.
Realizó sus estudios secundarios en el Colegio de Carúpano, donde obtuvo su
bachillerato en 1897. Cursó la carrera de medicina en la Universidad Central de
Venezuela, graduándose en 1904 y completando su formación profesional en la
Facultad de Medicina de la Universidad de París (1904-1905). Médico residente
de la Compañía Minera de El Callao (1905-1907).
Durante la presidencia del Benemérito General Juan Vicente Gómez, es
nombrado Director del Ministerio de Instrucción Pública (1909-1911) y Cónsul General
de Venezuela en Trinidad (1911-1913). Interventor de las aduanas de Puerto
Cabello (1913-1915) y Maracaibo (1915-1916), Cónsul General de Venezuela en
Santo Domingo (1916-1917), asumió los cargos de Director de la Biblioteca
Nacional (1917-1918) y de Inspector General de los hospitales del Distrito
Federal (1918-1925). Senador por el Distrito Federal (1918-1921) y por el Estado
Nueva Esparta (1922-1923), Presidente del Congreso (1921 y 1923) y Senador por
el Estado Aragua (1928), es nombrado Presidente del Estado Aragua (1929-1931) y
Secretario Privado del General Juan Vicente Gómez (1931-1933). Aparte de sus
trabajos publicados en el campo de la medicina, se destaca su libro "Vestigios
de la Atlántida" (1932), donde intenta vincular los restos del
misterioso continente desaparecido con vestigios arqueológicos encontrados en
la zona del lago de Valencia. Miembro fundador de la Academia de Ciencias
Físicas y Matemáticas, el 19 de junio de 1933.
Falleció en la ciudad de New York, Estados Unidos, el 20 de abril de
1946.
BIBLIOGRAFÍA NACIONAL
Caricatura del doctor Rafael Requena, realizada por Julio Méndez Rincones. Año 1932.
El doctor Rafael Requena, Secretario de la Presidencia de la República
de Venezuela y destacado hombre de ciencias, cuyo libro "Vestigios de
la Atlántida" ha causado gran
sensación en nuestros círculos científicos y literarios, por la luz que arroja
sobre los primitivos y milenarios habitantes del territorio nacional.
La aparición de esta obra en nuestro país marca una época fundamental en los estudios de Arqueología, Etnología y
Etnografía americanas ya que sus páginas levantan el velo que ocultaba en forma
densa los orígenes de la Pre-Historia de este continente.
Era menester que se hiciesen descubrimientos de una importancia
arqueológica tan notoria como los que ha verificado el señor doctor Requena en
los contornos de la Laguna de Tacarigua, para que la atención de nuestros
hombres de Ciencias y de Letras se dirigiera hacia estos altos estudios, que
son de provecho para la cultura universal. Merced a estas excavaciones en buena
emprendidas por el autor de referencia, con el documento humano que representa
el cráneo fosilizado de "Los Cerritos", además de los utensilios
diversos encontrados en la mencionada zona geológica, el doctor Requena ha sentado ante el mundo científico no ya una
simple hipótesis, sino una verdadera teoría, que muy bien puede bautizarse con el
nombre del descubridor de los curiosos e imponderables artefactos cerámicos de
la Laguna desde ahora famosa en los anales de la Pre-Historia venezolana.
Producto de largas observaciones y estudios es este libro en donde un
venezolano proclama, fundamentado sobre datos fehacientes, que los antiguos
pobladores de la Laguna de Tacarigua y, en consecuencia, los de toda esta
región de la América Meridional fueron descendientes de los antiguos atlantes.
Y he aquí que el maravilloso Continente a que aludió Platón y que los pacientes
estudios de los sabios, en el decurso de varios lustros, han reconstruido sobre
huellas antiquísimas, surge intacto del fondo del océano en que se hundió a
causa de un enorme cataclismo. Por manera que no es ya la fantasía de los
poetas, eternos clarividentes de las cosas y acontecimientos humanos, los que
exhumaron la civilización esplendorosa de una raza superior que poblaba la
Atlántida. Es ahora el dato del vestigio auténtico el que eslabona la serie de
descubrimientos arqueológicos hechos en la América, que comprueba el paso de
hombres avanzados sobre estas regiones hace millares de siglos, cuando todavía
las carabelas colombinas no habían surcado las ondas del Caribe.
Valencia. Laguna Tacarigua. Tesoros Aborígenes. En este grabado se ve el
cráneo de un indio encontrado junto con el valioso contingente que guardaba el
montículo donde pasaron más de cuatro siglos ocultos estos recuerdos de los
indios Tacarigua o de las tribus Jirajaras y Nirvas, quienes llegando a las
vecindades de la laguna Tacarigua, comunicaron a los pacíficos y laboriosos
indios de sus riberas parte de la rebeldía de su carácter.
Solamente la cerámica en colores de los idolillos, estatuillas de barro
cocido, utensilios de cocina, pipas y otros objetos encontrados en estas
excavaciones, que son la colección etnológica más completa que hay en Venezuela
y los cuales constituyen el Museo de
Prehistoria organizado por el señor doctor Requena, da una idea de la poderosa
civilización que tuvieron los primeros pobladores de esta zona de América. De
igual manera podríamos decir de los adornos personales descubiertos en la
Laguna de Tacarigua, como son los collares de marfil fosilizado, de coralina
con jades y discos de granito labrado; de los instrumentos musicales en barro
cocido y de marfil también fosilizado, algunos de los cuales ostentan
estilizaciones de cariátides, de batracios y de aves distintas.
No es posible en la brevedad de una nota bibliográfica hacer el juicio
crítico in extenso de una obra de la calidad de la del doctor Requena.
Únicamente diremos que su teoría de la geogénesis por el agua concuerda, como
lo asienta el autor en sus conclusiones, con la teoría de la formación
nebular de nuestro sistema planetario o sea el clásico concepto de Laplace y de
Kant.
La Atlántida eocena -asegura el autor- tanto explica una unidad de
origen con las tierras del oriente americano, como relaciona después de su
situación insular formaciones a causa de su hundimiento.
El descubrimiento del cráneo de "Los Cerritos" tiene una
trascendencia similar en ciencia arqueológica al descubrimiento del fósil del
hombre de Neandhertal.
"Vestigios de la Atlántida" es en verdad un libro atlante.
(Publicado en la revista "Élite", el 20 de agosto de
1932).
VESTIGIOS DE LA ATLÁNTIDA
Valencia. Laguna Tacarigua. Tesoros Aborígenes. Datando lo encontrado y
lo que forma este valioso museo, se puede tomar como punto de partida la
fundación de Valencia en el año 1555, apenas han transcurrido trescientos
setenta y cuatro años de ello, y como la pacificación de los Tacariguas y de
los Jirajaras que merodeaban por la cercanías de Carabobo y de Valencia, data
de ese mismo año, es muy posible que esto sea aún de tiempo más remoto, pudiéndose
con seguridad de marcar una fecha de más de cuatro siglos.
IMPORTANTE OPINIÓN DE UNA EXPERTA
Opinión de la señora Ana M. Mc Grath. Perteneciente al Departamento
Etnológico de la Universidad de Arizona.
"Me llevo una profunda impresión de la grandeza de
Venezuela, y de su Benefactor el General Juan Vicente Gómez, a quien se debe en
gran parte tanta grandeza. Sólo espero poder regresar para tomar parte en las
investigaciones arqueológicas del doctor Requena".
Durante mi corta estancia en Caracas y Maracay, he visitado las localidades
del Lago Tacarigua, donde se efectuaron muchos de los encuentros arqueológicos
del doctor Rafael Requena, y he examinado con detenimiento las más interesantes
y asombrosas reliquias del hombre prehistórico en Venezuela, que el doctor
Requena ha coleccionado en su Museo de Maracay y su residencia privada de
Caracas.
Soy de opinión que el trabajo de excavación iniciado y continuado por el
doctor Requena, es de la mayor importancia para solucionar la historia del hombre
en el hemisferio de occidente, y que sus descubrimientos revelan que el hombre
había alcanzado un grado de cultura relativamente alto en Venezuela en épocas
muy remotas.
La colección del doctor Requena es única, puesto que aun cuando hay un
parecido general entre muchos de los objetos, en forma y diseño a otros de arcaica
prehistoria de México y el suroeste de los Estados Unidos, la individualidad
artística es puramente local. Esta característica de la colección es tan
pronunciada que sugiere que Venezuela era un importante centro de cultura
prehistórica, lo que puede ser un eslabón importante en la solución de los
problemas culturales que se presentan más al sur en el continente y con los del
suroeste de los Estados Unidos.
Tengo la seguridad de que muchos hombres de ciencia vendrán a esta región
atraídos por los descubrimientos del doctor Requena y esperaré con interés todo
cuanto se vaya descubriendo en nuevas excavaciones ya iniciadas por el doctor
Requena, que tanta importancia ha de tener en la arqueología venezolana.
Me produce verdadero placer aprovechar la ocasión para expresar mi agradecimiento
por la cortés y amable recepción que se me dispensó en Venezuela, muy
especialmente al doctor Requena y su distinguida familia por su graciosa hospitalidad.
Me llevo una profunda impresión de la grandeza de Venezuela, y de su Benefactor
el General Juan Vicente Gómez, a quien se debe en gran parte tanta grandeza. Sólo
espero poder regresar para tomar parte en las investigaciones arqueológicas del
doctor Requena.
Ana M. McGrath.
Caracas, 1932.
(Publicado en la Revista "Billiken", el 19 de
noviembre de 1932).
EL DOCTOR RAFAEL REQUENA
Valencia.
Laguna Tacarigua. Tesoros Aborígenes.
La Royal Geographical Society de Londres, docta Corporación constituida por eminentes científicos, ha
nombrado al ilustrado etnólogo señor doctor Rafael Requena, miembro de ella.
Merecidísima designación que recae en un hombre de
ciencia de la talla del doctor Requena, cuyos magníficos trabajos acerca de la
prehistoria patria expuestos con notable acierto en su aplaudida obra
"Vestigios de la Atlántida", le sitúan en el empinado sitio que es
prez de la patria. La Royal Geographical Society de Londres Society en atención a las excelencias de la
obra del doctor Requena le discierne el honor mencionado como galardón a su ímproba y patriótica labor científica.
En efecto, "Vestigios de la Atlántida", por
las teorías originales del ilustrado autor acerca de la formación del orbe y
por la invalorable documentación sobre la cultura de nuestros aborígenes
exhibida en el ya célebre Museo Requena de Maracay, ha revolucionado las
teorías hasta ahora expuestas por sabios y escritores.
De allí la importancia que tiene para el mundo
científico la designación de la Royal Geographical Society de Londres para un
compatriota que honra la ciencia nacional y continental por la magnificencia de
su labor.
"Billiken" expresa su respetuosa
congratulación al ilustre hombre de ciencia señor doctor Rafael Requena por
este nuevo lauro que se refleja en su patria.
(Publicado en la revista "Billiken", el 10 de diciembre
de 1932).
ARQUEOLOGÍA.
IMPORTANTES DESCUBRIMIENTOS DEL DR. RAFAEL REQUENA.
VESTlGIOS DE LA ATLÁNTIDA.
Valiosa muestra de cantidad de ídolos de piedra y de barro que son una
verdadera maravilla; hay algunos que presentan el refinado arte azteca, otros
los rasgos de las momias egipcias, y en algunos mascarones resaltan las
perfecciones en sus líneas, como si hubieran sido hechos por artistas de original
concepción.
Recientemente se han llevado a cabo en este Estado importantísimas
investigaciones arqueológicas, dirigidas por el culto Dr. Rafael Requena, Secretario
Privado del señor Presidente de la República, Benemérito General Juan Vicente
Gómez, que han dado por resultado el descubrimiento de vasijas y utensilios de
manufactura primitiva, pero artística, hallados en las orillas del lago de
Valencia, o de Tacarigua, como antiguamente se le denominaba.
Más de 4.000 piezas constituyen la notabilísima colección del Dr.
Requena, entre las que sobresalen por su importancia los cráneos humanos, cuyas
especiales características han reforzado la hipótesis de una posible comunidad
de origen de las razas fenicias y chinas con las prehistóricas de América: tal
es la semejanza del arte representado por las piezas arqueológicas de esta
maravillosa colección con las de las antiguas civilizaciones asiáticas.
Se presume que el lago de Valencia haya sido asiento de adoratorios
indígenas, como el de Chiquinquirá en Colombia y los famosos del Perú y México.
La colección de collares es de indiscutible valor por ser piedras
talladas, pulidas y perforadas por su centro con una precisión única, sin
conocerse de qué se valían estos indios para ello. Un pomo de pintura roja,
fresca aún mueve la curiosidad de su perfecta conservación y los colmillos
sagrados y otras figuras ejecutadas sobre huesos de babas y pescados, tienen un
acabado perfecto. La colección de cachimbas, platones y morteros representan un
positivo valor.
El Dr. Requena ha llevado a cabo una minuciosa descripción de su valiosa
colección en una interesante obra titulada "Vestigios de la Atlántida",
que acabamos de recibir, y que ha de llamar la atención poderosamente, no solo
por la variedad de los objetos que describe, sino por las teorías que esboza,
basadas en el riguroso estudio científico de las reliquias encontradas.
Entre la colección citada predominan los artículos de marfil, jade y
barro, que tienen extraordinaria importancia por la finura del acabado y el
buen gusto de los dibujos, en los que los artífices indígenas dan prueba de su
adelanto en la copia de la Naturaleza y de su acierto en la elección de los
colores.
Es en extremo interesante la sección de los cráneos humanos, que
muestran un achatamiento extraño en los frontales, así como apreciables
variaciones en los maxilares y en el ángulo facial.
Teniendo en cuenta diversos factores y especiales características, el
Dr. Requena aprecia la antigüedad de los objetos de su valiosa colección, la más
importante, sin duda alguna, existente en Venezuela, en más de ocho mil años, y
la considera correspondiente a una raza muy anterior a los caribes encontrados
por los conquistadores. El hecho de no haberse hallado entre lo descubierto
huella alguna de metal, indica su probable procedencia de la edad de piedra.
Ánforas, cinceles de piedra, ornamentos y (entre estas últimas, hachas y
martillos principalmente), completan la interesante colección.
Entre estos objetos de indiscutible arte se admiran presiosas vasijas,
jarras maravillosas, pequeños envases que sin duda servían para conservar las
esencias aromáticas o para guardar el veneno de sus flechas; porta-ofrendas de
tipos diferentes, ánforas, lámparas sagradas, variadísimos ejemplares del Dios
Rana y una valiosísima colección de estilizaciones en piedra del Dios Murciélago.
En cuanto a la cerámica, el Dr. Requena hace notar que el motivo
femenino privaba en los dioses, los cuales guardan analogías muy curiosas con
las figuras egipcias. También hay otras deidades de diferentes formas que
tienen sorprendentes semejanzas con los budhas chinos; y en un jarrón,
verdadera maravilla del arte indígena, se puede apreciar una escena amorosa,
gracias a la cual el observador se da cuenta
del adelanto de aquella olvidada civilización.
El Dr. Requena merece un aplauso entusiasta por la perseverancia y celo
que ha puesto en este asunto y por el éxito obtenido con su importante obra;
cuya divulgación entre los sabios que se dedican a estas cuestiones ha de tener
una gran resonancia.
Ya en prensa este segundo tomo de nuestra obra, hemos visto con
satisfacción los juicios que ha merecido a la Prensa de España y a sus
instituciones científicas "Vestigios de la Atlántida", destacándose por su
interés los artículos dedicados a ella por el Boletín de la Sociedad Geográfica,
la Revista de las Españas, órgano de la Unión Ibero-Americana; La
Libertad, Blanco y Negro, que publica un interesantísimo trabajo del
Dr. Rodríguez Beteta; La Vanguardia, de Barcelona, y otros muchos, todos
ellos de firmas de gran prestigio.
(Publicado en el libro "Guía General de Venezuela" de F. Benet. Año 1933).