LEGACIÓN DE LOS ESTADOS UNIDOS DE VENEZUELA.
WASHINGTON D. C.
1° de marzo de 1921.
Señor General Juan Vicente Gómez. &., &., &.
Maracay.
Mi respetado General y amigo:
La inauguración de la estatua del Libertador que Venezuela ha regalado a la ciudad de Nueva York será un acontecimiento trascendental y de la mayor importancia política para nosotros.
Al propio tiempo que manifiesta su veneración por el Padre de la Patria, el Gobierno de Venezuela hace una demostración de amistad al pueblo de los Estados Unidos y congrega a los representantes de las Repúblicas Americanas al pie del monumento erigido en la Colina Bolívar del Parque Central de Nueva York, para declararles sus ideales de conformidad, en la paz, el trabajo, el progreso, la libertad y la justicia, que son los ideales de la América toda.
Desde que, hace más de cinco años, dispuso Ud. que se hiciera aquel obsequio, he venido preparando, conforme a sus deseos, la festividad de la inauguración con el fin de que allá tenga el mayor brillo y la mayor significación posible. La presencia allí del Presidente de los Unidos, ya casi asegurada, o la del Secretario de Estado, las dos más altas personalidades de este país, requiere que el Gobierno de Venezuela sea representado en aquella solemnidad por el Ministro del Relaciones Exteriores, ya que el Presidente de la República no le es dado ausentarse.
Considero, en efecto, de la mayor conveniencia política el que venga el Dr. Gil Borges a presidir dicha celebración. No se le escapan seguramente a Ud. las razones de gran peso que hay para ello. Más, si por alguna circunstancia imprevista e ineludible, no pudiere venir el Dr. Gil Borges, me permito indicar que el General Andrade, en su carácter de Ministro de Relaciones Exteriores y ex-Presidente de la República, sería la persona más señalada para sustituirle.
Aquí se espera una delegación presidida por el Ministro de Relaciones Exteriores; pero, si la venida de éste fuera absolutamente importante, el más caracterizado para presidirla sería el General Ignacio Andrade no sólo por ser el actual Ministro de Relaciones Interiores sino por haber ocupado la Primera Magistratura de la República.
En mi concepto, apareceríamos hasta cierto punto como indiferentes a la conmemoración de aquel día si no viniera para el 19 de abril el Dr. Gil Borges, o, en su defecto, el General Andrade, las dos personalidades hoy más caracterizadas del Gabinete venezolano.
Confiado en que nadie mejor que Ud. puede apreciar las favorables consecuencias, para Venezuela y para el Gobierno, del acto que se prepara, heme permitido exponerle la situación tal como la miro desde aquí.
Mande a su atento servidor y amigo afmo.
Santos A. Dominici.
HOMENAJE DE HARDING A LA GLORIA DEL LIBERTADOR
Breves días faltan para que el Presidente Electo Harding inicie sus
funciones como Jefe de la Gran Nación americana.
Esa circunstancia da mayor notoriedad a las declaraciones que de
seguidas publicamos, tomadas de la prensa de Nueva York, y en las cuales el
eminente ciudadano, que el próximo 4 de marzo empezará a dar páginas a la
historia como primer ciudadano de la gigantesca República cobijada por la
Bandera de las Estrellas y de las Barras, afirma sus propósitos
panamericanistas y esboza su ideal de un mayor y estrecho acercamiento entre
los Estados Unidos y las Repúblicas de habla hispana.
Esas declaraciones tienen especial halago para nuestro patriotismo en
los que se refieren al homenaje que el Presidente Harding tiene en mientes
rendir a la gloria del Libertador, con motivo de la próxima inauguración de la
estatua del héroe epónimo de América en el Central Park de Nueva York.
Sabemos que la opinión pública de Venezuela sentirá justo y noble
orgullo al tomar nota de la extraordinaria trascendencia que encierra el
pensamiento del Presidente Harding, así por los que significa el homenaje de
una poderosa nación representada en su Jefe, como por la mayor suma de
sentimientos fraternales que íntegra y de respetuosa deferencia a nuestra
Patria, que ahora, bajo este Régimen de Paz, de Orden, de Trabajo y de Equidad,
fundado por el Benemérito General Juan Vicente Gómez, se ve rodeada de la
amistad y de la estimación cordial de todas las naciones.
El gesto del Presidente Electo Harding, es motivo para que en Venezuela
se acrecienten las simpatías por el pueblo americano.
He aquí, en síntesis, las declaraciones:
"Mr. Harding se halla deseoso de fortalecer la solidaridad y cooperación,
tanto animosa como comercial, entre los Estados Unidos y las veinte repúblicas
hermanas, de modo sincero, basado en la más franca reciprocidad.
Refiriéndose a la inauguración de la estatua del Libertador en Nueva
York, dijo el Presidente Electo que en su concepto la inauguración y dedicación
en Central Park, el 19 de abril de 1921, de la estatua del General Simón
Bolívar, el Jorge Washington de la América del Sur, ofrecida por el Gobierno de
Venezuela, será un gran acontecimiento panamericano, al cual espera asistir
personalmente, o bien representado por su Secretario de Estado, o los dos".
(Publicado en el periódico "El Nuevo Diario", el 1 de marzo de
1921).
La prensa publicó: "Venezuela, colocada por el patriotismo del
Benemérito General J. V. Gómez en altura moral que le ha conquistado el respeto
del mundo, envía para que la represente en la inauguración de la estatua del
Padre de la Patria, una brillante Delegación escogida entre personalidades
descollantes cada una en su esfera de acción".
Estados Unidos de Venezuela.
Ministerio de Relaciones Exteriores.
Dirección del Ceremonial y de Cancillería.
Caracas, 5 de marzo de 1921. 111° 63°.
Resuelto:
Por disposición del ciudadano Presidente Provisional de la República se
nombra Delegados para representar a Venezuela en la inauguración de la estatua
del Libertador que se efectuará en el Parque Central de Nueva York, el 19 de
abril del presente año, a los señores Felipe Francia, Francisco Javier Yanes,
doctor José Santiago Rodríguez, Jesús María Herrera Mendoza y Manuel Segundo
Sánchez. El doctor Santos A. Dominci, Enviado Extraordinario y Ministro
Plenipotenciario de la República en los Estados Unidos de América, presidirá la
Delegación.
Comuníquese y publíquese.
Por el Ejecutivo Federal,
Esteban Gil Borges.
De izquierda a derecha: El Doctor Santos A. Dominici, Enviado
Extraordinario y Ministro Plenipotenciario de Venezuela en Washington, el señor
Manuel Segundo Sánchez y el Doctor José Santiago Rodríguez.
Como se sabe, el 19 del próximo mes de abril, fecha gloriosa en nuestros
anales, quedará inaugurada la Estatua Ecuestre del Libertador, que en prenda de
amistosos sentimientos y signo inequívoco de cordialidad para el pueblo
americano, ha regalado el Gobierno Nacional a la Municipalidad de Nueva York.
La estatua se eleva en el Central Park de aquella gran ciudad, y es por
todos respectos digna del objeto a que se le dedica.
La inauguración de esa estatua asume, como ya lo hemos publicado, la más
alta importancia para el Gobierno y pueblo de los Estados Unidos. En estas
mismas columnas, no hace mucho, nos fue grato hacer trascendentales los
conceptos del Presidente Harding a ese respecto, y su decisión de de asistir
personalmente a la fiesta de inauguración, para dar así testimonio solemne del
alto aprecio del Gobierno y del pueblo de los Estados Unidos por el valioso
obsequio que hace Venezuela, y para decir elocuentemente que el noble patriotismo
del pueblo de Washington, vibra también entusiasta y rinde homenaje a las
glorias del Libertador de cinco grandes pueblos de habla hispano.
En las fiestas de la inauguración se evidenciará una vez más y con todo
esplendor, el hecho consumado e irrevocable de al Unión Panamericana, que
solidariza los distintos intereses de la América entera y es basamento poderoso
para su porvenir, en el cual está vinculado el futuro mismo de la Humanidad.
Venezuela, colocada por el patriotismo del Benemérito General Juan
Vicente Gómez en altura moral que le ha conquistado el respeto del mundo, envía
para que la represente en la inauguración de la estatua del Padre de la Patria,
una brillante Delegación escogida entre personalidades descollantes cada una en
su esfera de acción.
Para presidir esa Delegación está nombrado el señor doctor Santos A.
Dominici, ilustre como hombre de ciencia, que figura entre los médicos
venezolanos más eminentes, ha recibido altísimas demostraciones en los grandes
centros científicos de Europa, y que hace años desempeña la representación
diplomática de Venezuela en Washington, con nuevo honor para su nombre;
honrando asimismo a la Patria.
De izquierda a derecha: El señor Francisco Javier Yanes, el señor Felipe
Francia y el señor Jesús María Herrera Mendoza.
El señor Felipe Francia, figura de las más honorables de la sociedad
venezolana, de apellido ilustre, es, además de un cumplido caballero, un
espíritu que ha ahondado en nuestros anales y ha dado páginas brillantes de
historia, relacionadas todas con el nombre del Libertador, de quien es un
entusiasta admirador.
El señor doctor Francisco Javier Yanes, de ilustre prosapia, descendiente
de Patricios de nuestra Independencia, hace años que vive en los Estados
Unidos, donde sus capacidades y su vasta inteligencia, tanto como su
honorabilidad, le han conquistado un alto rango, así en lo social como en la
pública actividad, en la cual se ha destacado ante la opinión de la América,
como Subdirector de la Unión Panamericana.
El señor doctor José Santiago Rodríguez, abogado de los que más renombre
tienen actualmente entre nosotros, como entidad social posee sólidos merecimientos,
y como servidor de la Nación, en las recientes misiones que le encomendó el
Gobierno en los Estados Unidos y en varios países de Europa, demostró su
patriotismo y su idoneidad.
El señor Jesús María Herrera Mendoza, de apellidos que por sí solos son
un certificado de honor, es una de las figuras descollantes de nuestro medio,
así por su actuación social como por ser una de las firmas comerciales más
acaudaladas del país.
El señor Manuel Segundo Sánchez, de posición social prestigiosa, agrega a su personalidad la muy
envidiable condición de poseer honroso renombre como escritor y en especial es
conocido en América por sus trabajos históricos. Su labor como Director de la
Biblioteca Nacional es uno de sus merecimientos.
Los señores Felipe Francia, José Santiago Rodríguez y Manuel Segundo
Sánchez, son Miembros de la Academia Nacional de la Historia.
Como se ve, no puede ser más selecta la representación de Venezuela en
la inauguración de la Estatua del Libertador; y es con toda cordialidad como
nos congratulamos con del Gobierno que la designó y con los distinguidos
compatriotas que han sido objeto de tan honrosa distinción.
(Publicado en el Periódico "El Nuevo Diario", del 6 de marzo
de 1921).
Decreto para acordar créditos adicionales para la estatua del
Libertador Simón Bolívar, el 4 de abril de 1921.
Créditos adicionales recibidos por el Doctor
Estaban Gil Borges, con motivo de sus gastos en la misión especial a presidir la Delegación de Venezuela, acordados para la inauguración de la estatua del Libertador Simón Bolívar en el Central Park de New York. Publicado en la Gaceta Oficial.
La magnífica estatua ecuestre del Libertador Simón Bolívar, que ordenó
regalar el Benemérito General Juan Vicente Gómez, Presidente Electo y
Comandante en Jefe del Ejército, a la ciudad de New York en 1921.
Una estatua ecuestre, de bronce coronará la cima de la Colina de Bolívar
el 19 de abril próximo, gran efemérides venezolana, cuando se descorra la
bandera de Venezuela que oculta la hermosa estatua, obra de Sally James Farnham.
Se susurra que el Presidente Harding, descorrerá la bandera con sus propias
manos.
La Colina Bolívar está situada en el Parque Central, entre la calle 83 y
la calzada del oeste del parque. El nuevo monumento es un regalo que hace
Caracas, cuna del grande hombre, a la ciudad de Nueva York.
La obra de nuestra escultora Sally James Farnham, bien conocida de los
suramericanos por sus frisos del edificio panamericano de Washington. La
artista está trabajando en los bustos de varios estadistas hispanoamericanos y
está profundamente interesada en el estudio de la historia de aquellos países.
A la izquierda: La gran escultora
norteamericana Sally James Farnham en su taller. A la derecha: La
artista posando orgullosa al lado de su la bella obra dedicada al Libertador
Simón Bolívar en la ciudad de New York.
"Bolívar -dice la escultora- fue siempre uno de mis héroes
favoritos. Sentí gran júbilo cuando gané el premio en el concurso de 1916; y
comencé con gran afán mi primera estatua ecuestre. Durante seis meses trabajé
en el establo de un amigo, en la calle 46, haciendo una estatua de la tercera
parte del tamaño que debía tener el modelo definitivo. Competía con grandes
artistas y no ahorré esfuerzo alguno por hacer del caballo de Bolívar una obra
meritoria.
Cuando todos nuestros Bolívar en miniatura estuvieron listos, la
Comisión de Arte de la Municipalidad de Nueva York eligió tres modelos que les
parecieron aceptables para la ciudad, las cuales fueron enviados a Venezuela, de
modo que Caracas pudiera escoger el que más le agradara. Y, con orgullo lo
dije, el Gobierno aceptó el mío por aclamación.
Entonces comenzó el trabajo de verdad, en medio de los años difíciles de
la guerra, al través de indecisiones y retardos que casi me desanimaron. Mi
caballo se desmoronó durante el verano de 1919 y tuve que modelarlo de nuevo y
por completo…".
El bronce heroico que Nueva York verá por primera vez el 19 de abril
mide 22 pies
de altura desde la base hasta el ápice del monumento. El caballo y el jinete
tienen 15 pies
de altura. Bolívar aparece en la actitud de saludar a una muchedumbre
aclamadora. El caballo no está encabritado.
Para alcanzar el parecido del héroe la escultora se atuvo a un libro que
le suministró el gobierno venezolano, en el cual están coleccionadas las
fotografías de diferentes retratos y estatuas del Libertador. De allí sacó ella
su interpretación personal del héroe, en el instante del triunfo.
Existen estatuas ecuestres de Bolívar en Lima, Guayaquil y Bogotá. Los
biógrafos describen el aspecto personal de Bolívar con imágenes apasionadas y
floridas: "aquella frente que atezaron los soles del trópico",
"sus ojos eran dos diamante negros", "Bolívar era el ideal del
cortesano y del guerrero"… Venezuela había advertido a los artistas
que participaban en el concurso que no tomaría en cuenta fantasías ni
creaciones caprichosas.
Toda la América española estará representada en la ceremonia de la
inauguración de la nueva estatua. Venezuela enviará una misión especial que
debe llegar pronto a Nueva York, presidida por el doctor Esteban Gil Borges,
Ministro de Relaciones Exteriores. Las otras cuatro naciones que le deben su
independencia al héroe, Perú, Bolivia, Colombia y Ecuador, enviarán
delegaciones más tarde. El Presidente Harding ha manifestado su interés por la
fiesta y su significación, y ha prometido asistir con su gabinete. La ceremonia
será imponente.
Venezuela celebra el 19 de abril porque en ese día, el año de 1810, se
dio en Caracas el primer paso hacia la independencia.
La bandera venezolana que arropará la estatua es un tricolor amarillo,
azul y rojo, adornado con muchos símbolos históricos.
Marian Storn.
(Publicado en el Periódico "El Nuevo Diario", el 8 de abril de
1921).
EL MINISTRO DE RELACIONES EXTERIORES.
PARTICULAR.
Caracas, 18 de abril de 1921.
Señor General Juan Vicente Gómez. &., &., &.
Maracay.
Muy respetado General y amigo:
Tengo mucho gusto en enviarle con la presente las dos fotografías que
reproducen la medalla conmemorativa que va a distribuirse con motivo de la
inauguración de la estatua del Libertador en Nueva York, las cuales me acaban
de llegar con carta de Don Manuel Segundo Sánchez, quien a su vez las envía en
nombre del Dr. Dominici. La medalla tiene un diámetro de dos y media pulgadas,
según me dice el propio señor Sánchez que ha estado entendiéndose con su
construcción.
Lo saluda muy respetuosamente su amigo y adicto servidor,
Pedro Itriago Chacín.
DESCRIPCIÓN DE LA MEDALLA CONMEMORATIVA
ANVERSO: En el
campo, reproducción de la estatua ecuestre de Simón Bolívar que corona el
monumento, sin gráfila, alrededor de forma circular, hay una inscripción que
reza así:
"MONUMENTO ERIGIDO EN LA COLINA BOLÍVAR DEL CENTRAL PARK DE NUEVA
YORK E INAUGURADO EL 19 DE ABRIL DE 1921".
REVERSO: En el campo,
al centro una alegoría que muestra dos figuras de mujeres sosteniendo una
antorcha que representan los dos Continentes Americanos unidos en la causa de
la Libertad y la Justicia. Del lado izquierdo, sobre un sol naciente el texto "EL
LIBERTADOR, 1783 - 1830". Sin gráfila, alrededor de forma circular,
hay una inscripción que reza así: "LA GLORIA ESTÁ EN SER GRANDE Y EN
SER ÚTIL - BOLĺVAR".
Año :1921.
Metal: bronce.
Peso: 111,5
gramos.
Diámetro: 63,5 mm.
Canto: liso.
Telegrama del Doctor Estaban Gil Borges, dirigido al Benemérito General
Juan Vicente Gómez, Presidente Electo y Comandante en Jefe del Ejército, el 18 de abril de 1921.
Compagnie Francaise des Cables Telégraphiques.
De Nueva York a Caracas, el 18 de abril.
General Gómez, Presidente Electo.
Hoy tuvo lugar la recepción por el Alcalde y las autoridades de la
ciudad de Nueva York. Imposible describir la magnificencia de la ceremonia y la
cordialidad de los testimonios de amistad para Venezuela.
Hoy, en las calles, casas y automóviles de Nueva York, está enarbolada
la bandera de Venezuela.
Una onda de entusiasmo nacional levanta el gran corazón de este país,
que manifiesta sus sentimientos con indescriptible grandeza. Acabamos de
condecorar la ciudad de Nueva York, poniendo en su bandera el Busto del
Libertador; la ceremonia fue conmovedora.
Me congratulo, General, con usted por este momento glorioso de nuestra
vida nacional, que será inolvidable en la historia de los dos Países.
Adicto amigo,
Esteban Gil Borges.
LA INAUGURACIÓN DEL MONUMENTO EL 19 DE ABRIL DE 1921
Las aceras de la Quinta Avenida de la ciudad de New York, se encontraban
literalmente repletas de curiosos que deseaban presenciar el desfile, el 19 de abril
de 1921.
Pocos días antes de la fecha fijada para la inauguración del monumento
consagrado a Bolívar se anunció formalmente
que el Presidente de los Estados Unido y Secretario de Estado de esta República
asistirían al acto, como testimonio de admiración por el héroe y de simpatía y
aprecio por Venezuela y por la América Latina en general.
Era la primera vez que el Presidente Warren G. Harding visitaba a Nueva York desde
que fue elegido Presidente, y esa circunstancia redobló naturalmente la
expectación y la curiosidad de los neoyorquinos. El programa preparado al
efecto estipulaba que el Presidente llegaría de Washington en tren especial a
la estación de Pensilvania y de allí se dirigiría directamente al Hotel Waldorf
Astoria, donde se hospedaba la misión venezolana.
Ese mismo día 19 de abril de 1921, el doctor Esteban Gil Borges y la
misión venezolana ofrecieron un almuerzo al Alcalde Señor Hylan, a los miembros
de la comisión de recepciones de huéspedes distinguidos del municipio neoyorquino
y a algunos miembros del séquito presidencial que se encontraban ya en Nueva
York, entre los cuales se contaban altos funcionarios de la nación como el Secretario
de Estado Mr. Hughes, el Procurador General Harry M. Daugherty y la mayor parte
de los diplomáticos latinoamericanos acreditados en Washington.
El Presidente Harding y la señora Harding entraron en el Hotel por la
puerta de la calle 32, reservada para estas ocasiones solemnes. Eran las cuatro
y cuarto de la tarde.
En las calles vecinas se apiñaba una muchedumbre enorme ansiosa de ver
al Presidente. Las aceras de la Quinta Avenida se encontraban literalmente
repletas de curiosos que deseaban presenciar el desfile.
En los salones del Hotel se aglomeraba otra muchedumbre distinguida,
formada por generales, almirantes, diplomáticos, altos funcionarios del
municipio y personajes prominentes en todas las actividades de la metrópoli.
Los invitados aguardaban la llegada del Presidente, anunciada para el fin del
almuerzo.
Se organizó luego la marcha hacia la colina Bolívar por la Quinta
Avenida, la cual fue un desfile triunfal, según la frase empleada por reporteros
circunspectos. La comitiva avanzaba entre dos alas de gente, en la cual el paso
de los carruajes iba provocando un clamoreo sonoro, tal como la mano del
pianista que se desliza por el teclado de un piano, va arrancándole vibraciones
profundas.
El tricolor venezolano y la bandera de las Estrellas y las Barras predominaban
en las decoraciones de la Quinta Avenida.
En el Parque Central se encontraba apostada una guardia de policía, desde
la entrada de la calle 86 hasta el pié de la colina Bolívar, donde el
Presidente, la señora Harding y el señor Hughes bajaron del automóvil que
ocupaban, mientras el Presidente echaba algunas paletadas de tierra con las
raíces de un roble sembrado ese día, el cual crecerá como un símbolo de la
fortaleza del Héroe al pié del otero en cuya cima se yergue el Libertador. Cuando
el Presidente se inclinaba para empuñar la azada, los cañones rompieron en una
salva de veintiún disparos.
El Presidente norteamericano Warren G. Harding en el momento de sembrar
un roble como homenaje al Libertador Simón Bolívar, el 19 de abril de 1921.
A cada lado del camino que había de recorrer el Presidente se
encontraban en formación unos 400 soldados regulares de la guarnición de
Governor Island, cuyas filas se extendían desde la falda hasta el ápice de la
colina. El callejón así formado iba a terminar en el grupo heterogéneo y
pintoresco formado por los soldados de marina y marineros del acorazado
brasilero Minas Geraes con vistosos uniformes rojos, la vieja guardia
neoyorquina con sus vistosas escarapelas y los blue-jackets norteamericanos.
Emotivo y muy significativo momento histórico
del acto de la inauguración de la estatua del Libertador Simón Bolívar, el 19
de abril de 1921, en el Central Park de New York.
Como había llovido con pertinacia en los dos días anteriores y el cielo
permaneció encapotado en la mañana del 19 se había instalado en la colina una
tienda abierta para el caso en que la lluvia comenzara a caer durante las
ceremonias de la inauguración. Por fortuna no ocurrió tal cosa, pero allí se
colocó el estrado para los principales miembros de la comitiva.
Las miradas de los millares de espectadores convergían hacia la gran
estatua arropada en banderas. Por un lado se hallaba envuelta en el pabellón
americano y en el venezolano por el otro. De la estatua solo se divisaban la
cola y las orejas del corcel.
Compartían con el Presidente y con la estatua la curiosidad de los espectadores
la escultora de Bolívar, señora Sally James Farnham y dos niñas gentiles, de
ilustre prosapia venezolana, Mariquita y Patricia Páez Mc Manus, tataranietas
del General José Antonio Páez. Mariquita tiene nueve años y Patricia o Patsy,
como se la llama en el circulo familiar, siete. Es de imaginarse el orgullo con
que las dos pequeñuelas, por cuyas venas corre la sangre del prodigioso
centauro sostenían en sus manitas los cordones por medio de los cuales iban a
descorrer las banderas que arropaban la estatua.
Otro instante del histórico acto de la inauguración de la imponente estatua del Libertador Simón Bolívar, el 19 de abril de 1921, en el Central
Park de New York.
Resonaron los acentos del himno nacional de Venezuela y luego los del
norteamericano. En seguida una trompeta dio la señal y las dos chiquillas, sin
duda estremecidas de entusiasmo, tiraron de las cintas y descorrieron las
banderas que envolvían la estatua. Se oyeron luego los estampidos de una salva
de artillería y empezó entonces la ofrenda de coronas al pié del monumento.
El doctor Estaban Gil Borges pronunció el discurso de presentación de la estatua, seguido por las sentidas palabras del Alcalde Hylan, aceptando la estatua en nombre de la
ciudad, y del Gobernador del Estado de Nueva York, Mr. Miller.
El Presidente norteamericano Warren G. Harding,
en el momento de pronunciar su discurso ante la estatua del Libertador Simón
Bolívar, el 19 de abril de 1921, en el Central Park de New York.
El último discurso fue el del Presidente Warren G. Harding, discurso que se esperaba
con ansia, especialmente en los círculos hispanoamericanos, pues desde que se
supo aquí que el Jefe del Ejecutivo Norteamericano asistiría personalmente a la
ceremonia, se dijo con insistencia que su discurso contendría importantes declaraciones
respecto a la política de Washington en sus relaciones con las demás naciones
del continente, y los lectores habrán ya leído el texto del discurso de Mr.
Harding, lleno de calurosas expresiones de americanismo. No lejos del lugar en que
habló el Presidente se encontraba montado un aparato inalámbrico, especialmente
destinado a transmitir a Venezuela y a Sur América sus palabras, a medida que
las fuera pronunciando. Manejó el aparato el Teniente Toro Key, del Ejército
venezolano.
En el enorme gentío que acudió a la fiesta se distinguían numerosos
grupos de suramericanos y se oía hablar español a cada paso. Y no solo
concurrieron a la fiesta personas a quienes sus ocupaciones se lo permitían, sino
también muchísimos obreros hispano-americanos, que holgaron el 19 de abril de 1921
con el único designio de presenciar la inauguración.
Después del discurso del Presidente Warren G. Harding, bendijo el monumento el
Reverendo William T. Manning.
Mientras se efectuaban estos actos el aviador peruano R, Martínez
Merizalde volaba en un avión sobre el Parque Central, dejando caer sobre la
concurrencia millares de hojas que contenían el siguiente mensaje:
"En los aires, desde un Curtiss. El Teniente R. Martínez Merizalde,
comisionado del Perú, en nombre del Ejército a que pertenece y particularmente
en representación de los camaradas que forman la misión peruana en este país,
saluda de todo corazón al Presidente de los Estados Unidos de América, Mr.
Warren Harding, a la ciudad de Nueva York y a todos los sudamericanos que han acudido
para asistir a la inauguración oficial de la estatua dedicada al Libertador Bolívar".
Posteriormente la colina Bolívar ha seguido siendo lugar de cita
especialmente los domingos, de los suramericanos que no asistieron a la
inauguración, o que habiendo asistido quieren contemplar de nuevo la figura
marcial del héroe.
LA ESTATUA
Dos gráficas de la escultora norteamericana Sally James Farnham en el taller,
posando ante su maravillosa obra ecuestre de Simón Bolívar, el Padre de la
Patria.
La estatua modelada por la señora Farnham es hermosa y digna del héroe, según
el consenso de los entendidos. El haber sido aprobada por dos jurados
competentes es la mejor garantía de su mérito artístico.
Se conoce la historia del monumento. Abierto un concurso, la comisión de
ornamentación de parques del Municipio neoyorquino escogió, de los modelos presentados,
cuatro que fueron enviados a Caracas, y el Gobierno venezolano, asesorado por
personas competentes, eligió sin vacilaciones el modelo de la señora Farnham.
Bolívar aparece a caballo, en la actitud de saludar a una muchedumbre
que lo aclama. En la cumbre de la colina la estatua produce cierto efecto
solemne y grandioso.
El público de Venezuela estará sin duda familiarizado a estas horas con
el monumento neoyorquino por medio de numerosas fotografías que están en
circulación y las que se han hecho especialmente para enviarlas a la prensa de
Sur América.
FELICITACIÓN AL PRESIDENTE GÓMEZ DEL DOCTOR
SANTOS DOMINICI
Doctor Santos Dominici.
Compagnie Francaise des Cables Telégraphiques.
De Nueva York a Caracas, el 19 de abril.
General Juan Vicente Gómez, Presidente Electo.
Mis sinceras congratulaciones. Este ha sido día grandioso para la Patria. El hermoso discurso del Presidente Harding en que glorifica el 19 de Abril y al Libertador, entre muchas otras declaraciones amistosas para Hispano-América, dice:
"Los Estados Unidos saludan a Venezuela y a las naciones suramericanas nacidas del holocausto de Bolívar en los altares de la Libertad, y comprometen solemnemente su devoción a la misma Libertad, la misma Justicia, las mismas aspiraciones de independencia nacional, la misma mirada hacia el porvenir, unidos hombro con hombro, mientras avanzamos para realizar mayores obras".
Y agrega: "En la actualidad, pensamos principalmente en las Américas: ellas se agrupan alrededor de la estatua del gran Bolívar y los buenos presagios que éste ofrece, así como la dádiva de una Nación, que siempre lo ha reverenciado y que se une a Venezuela para defender y perpetuar la obra de los hombres libres. Me regocija este testimonio de la gratitud de Venezuela, y proclamo esta estatua como ídolo de profunda simpatía y la recíproca consideración que sirven de base a las naciones de estos dos Continentes. Que esa estatua perdure como prenda de una cooperación más efectiva, de mejor inteligencia y de una amistad más íntima y cada vez más confiante".
Conmovido, felicítole de nuevo por la apoteosis que acabamos de presenciar.
Santos Dominici.
(Publicado en el periódico "El Nuevo Diario", el 21 de abril de 1921).
FELICITACIÓN
AL PRESIDENTE GÓMEZ DE DON ANDRÉS MATA
Congratulaciones del gran poeta, fundador del
diario "El Universal", don Andrés Mata al General Juan Vicente Gómez, el 26 de abril de 1921.
FELICITACIÓN AL PRESIDENTE GÓMEZ DEL DOCTOR PEDRO
CÉSAR DOMINICI
El Doctor Pedro César Dominici, escribió una emotiva carta llena de fervor patriótico y
sincera felicitación al General Juan Vicente Gómez por los actos de la
inauguración de la estatua del Libertador en el Central Park de New York.
ESTADOS UNIDOS DE VENEZUELA
LEGACIÓN EN LONDRES
7 Richmond
Mansions.
Eearls Court Road S. W.
Londres, 9 de junio de 1921.
Señor General Juan Vicente Gómez, &., &., &.
Caracas.
Mi distinguido General:
Acabo de leer en la prensa de Caracas, la descripción detallada de las
fiestas en los Estados Unidos con motivo de la inauguración de la estatua del
Libertador; y le escribo entusiasmado porque ellas constituyen la consagración
más trascendental de la política de usted y el reconocimiento de los inmensos
beneficios que está haciendo a Venezuela el Gobierno que usted dirige.
Está llevando usted al país a la cumbre de su prestigio. El nombre de
Venezuela, es hoy respetado por la obra de usted, de la cual tenemos que estar
todos orgullosos. Puede usted esperar tranquilo el juicio de la Historia, y
desdeñar lo que de usted puedan propagar media docena de revolucionarios sin
autoridad moral ni pueblo que les crea ni les siga; y que desean el poder para
vender a pedazos, el territorio a los extranjeros a quienes sacaron dinero para
comprar vapores y armas. Como si bastase con tener dinero y cañones para
derrocar a un Gobierno como el de usted.
La Escuela de Aviación, la organización de la Marina de Guerra, la Escuela
de Artillería, la Academia Militar, la excelencia de nuestras relaciones
diplomáticas con todas las Naciones, el sabio manejo de la Hacienda Pública, la
política Comercial, el culto de nuestros Héroes: qué Revolución puede intentarse
contra un Gobierno que en un mismo momento está llevando a cabo todas esas
cosas, presidido por un Jefe sano de cuerpo y de espíritu, que sabe lo que
quiere y adónde va... Locura de media docena de vulgares ambiciosos, y nada más…
De lo cual puede usted reírse…
Su muy devoto y leal amigo,
Pedro César Dominici.
(Publicado en el "Boletín del Archivo Histórico de
Miraflores", Número 52-58, Caracas, Enero 1968-Febrero 1969, Año IX-X).
Monumento Ecuestre del Libertador Simón Bolívar,
realizado por la escultora norteamericana Sally James Farnham, copia del original
del Central Park de New York de 1921. Bronce, 55 x 14 x 53 cms. Museo
Bolivariano y Casa Natal del Libertador en Caracas, Venezuela. También existe
una copia en la Organización de los Estados Americanos en Washington, D. C.
UNA PELĺCULA DEL ACTO DE LA INAUGURACIÓN DE LA
ESTATUA
El Presidente Provisional de la República, el Gobernador del Distrito Federal y otros altos funcionarios de la Nación presencian la exhibición de la famosa film.
Magnífica película de 6.000
pies, ejecutada en Nueva York por encargo especial del
señor Víctor V. Maldonado, Director de la revista venezolana "La
Hacienda" y en la cual reproducen los actos verificados en los Estados
Unidos con motivo de la inauguración de la estatua del Libertador, obsequiada
por el Gobierno de Venezuela, a la gran Metrópoli del Mundo.
Un acto por lo demás interesante se verificó en la noche del martes, 14
de junio de 1921, en la residencia particular del señor Víctor V. Maldonado,
Director de "La Hacienda", quien como es del dominio público,
mandó ejecutar a los Estados Unidos una cinta cinematográfica que reproduce los
grandes festivales verificados en homenaje al Libertador.
El estimable señor Director de "La Hacienda" convirtió
los espaciosos corredores de su residencia en elegante salón teatral,
ornamentado con gusto y sobriedad.
En sitio de honor estaba colocada la efigie del Libertador, rodeada de
los colores nacionales de Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia; en el
centro, del lado izquierdo, los retratos, tamaño natural, del Benemérito
General Juan Vicente Gómez, Presidente Electo de la República y Comandante en
Jefe del Ejército Nacional; del General José Vicente Gómez y del Coronel Alí
Gómez; del lado derecho los retratos del Doctor Victorino Márquez Bustillos,
Presidente Provisional de la República, y del General Juan C. Gómez, Gobernador
del Distrito Federal; y en la parte superior del frente, rematado el cuadro
formado por el telón, un hermoso letrero de cuatro metros de longitud, hecho
con bombillas eléctricas, con la hermosa inscripción "Paz y
Trabajo".
La iluminación general fue hecha con profusión de bombillas de color y focos
de alta potencia; y distribuidos con gusto exquisito, gallardetes y banderas
con colores de Venezuela, de los Estados Unidos de América y de las demás
Repúblicas Bolivianas.
Fueron invitados de honor del señor Maldonado para asistir a la
interesante proyección del film patriótico, el señor Doctor Victorino Márquez
Bustillos y el señor General Juan C. Gómez, a quienes acompañaron los señores:
doctor Rafael Requena, Presidente del Congreso Nacional; doctor José R. García,
señor doctor Román Cárdenas, Ministro de Hacienda; doctor Pedro Itriago Chacín,
Ministro de Relaciones Exteriores; doctor Elías Rodríguez, Secretario General
del Presidente Provisional de la República; doctor Ramón E. Vargas, Secretario
del Gobernador del Distrito Federal; General Lorenzo R. Carvallo, Prefecto del
Departamento Libertador; Coronel José M. Aranda, Secretario Privado del
Gobernador del Distrito Federal; Coronel Pedro García, Jefe del Cuerpo de
Policía de Caracas; General Tobías Uribe, Director de Telégrafos y Teléfonos Nacionales;
doctor Isaac Capriles, Director General de Correos; doctor Lisandro Alvarado,
Director en el Ministerio de Relaciones Exteriores y Vicepresidente del Comité
Ejecutivo de los Concursos de "La Hacienda"; doctor P. Hermoso
Tellería, Coronel M. López Méndez, Coronel Eleazar López Contreras, Coronel
Armando Márquez Iragorry, señor Carlos L. Marín, G. Pimentel Troconis,
Francisco Centeno Graü, General M. M. Gallegos, Teniente Omar Briceño, Luis
García Alcántara, Pedro Manrique Arvelo, Coronel Eugenio Castillo, Dimas R.
Michelena y José G. Humarán, ejecutor de la película.
Terminada la exhibición, el señor Maldonado, su señora esposa y su
señorita hija, obsequiaron al Doctor Márquez Bustillos, al General Juan C.
Gómez y a sus distinguidos acompañantes, con una copa de champaña, que fue
brindada a la salud del Benemérito General Juan Vicente Gómez.
Como un detalle importante, por la justicia que encierra y por la
trascendencia del suceso, insertamos la leyenda final de la famosa película que dice así:
"Los acontecimientos verificados en la gran
República del Norte, iniciados desde el instante en que el señor General Juan
Vicente Gómez, Presidente Electo de la República y Comandante en Jefe del
Ejército Nacional regaló a la ciudad de Nueva York la monumental estatua del
Libertador, han determinado la condensación de los grandes ideales del Padre de
Colombia, y han marcado nuevos derroteros a los pueblos que aspiran a vivir en
el seno del orden, de la paz y de la confraternidad. Esos ideales magnos
constituyen el Programa de la actual Administración Pública de Venezuela,
sintetizado en estas frases: "Paz y Trabajo", "Patria y
Unión".
Pasados algunos minutos se retiró la
concurrencia ampliamente satisfecha de la obra ejecutada por encargo del señor
Director de "La Hacienda", la cual ha merecido ya los aplausos
del Benemérito Jefe del País, General Juan Vicente Gómez, ante quien fue
exhibida en Maracay, la noche del sábado 11 de junio de 1921.
(Publicado en el Periódico "El Nuevo
Diario", el 15 de junio de 1921).
Anuncio de la gran película sobre el acto de la
inauguración de la estatua del Libertador Simón Bolívar en la ciudad de New
York.
ÚNICA EN SU ESPECIE
Son nuestros los derechos de propiedad.
Podemos afirmar que más de treinta películas ejecutadas con igual
motivo, son simples fragmentos comparadas con la nuestra.
De la película de "La Hacienda" sólo existe hasta hoy una
copia, pero como poseemos las matrices que son de nuestra exclusiva
propiedad, estamos en capacidad de suplir copias para todas partes.
La película de "La Hacienda" será exhibida muy pronto en
Caracas. No hay que confundirla con otras análogas. Las Empresas que contraten nuestra película
expresarán claramente cada vez que
anuncien su exhibición que se trata de la película de "La Hacienda", única completa, única racional y lógicamente ejecutada, única hecha con
arte y maestría.
Dirigir la correspondencia a la Dirección de "La Hacienda".
Caracas, Venezuela.
(Publicado en el Periódico "El Nuevo Diario", el 15 de junio
de 1921).