El Benemérito General Juan Vicente Gómez, Presidente de la República de
Venezuela, en cuyo Gobierno se inició el conocimiento y desarrollo de las Ciencias
Veterinarias en nuestro país.
HISTORIA DE LA VETERINARIA
LA OFICINA MÉDICO VETERINARIA DEL MINISTERIO
DE SALUBRIDAD, AGRICULTURA Y CRÍA DE
VENEZUELA; UNA VISIÓN ADELANTADA DEL ONE
HEALTH EN EL PRIMER TERCIO DEL SIGLO XX
(Por: Naudy Trujillo Mascia y Milva Javitt Jiménez)
El Gobierno del General Juan Vicente Gómez, Presidente de la República de
Venezuela entre 1908 y 1935, puso énfasis en la organización del Estado, en la
promoción de investigaciones y estudios, así como en la apertura a los
adelantos científicos; todo con el propósito de ajustar la Nación a los nuevos
tiempos, signados por ideas de modernismo y de progreso. En tal sentido, y de
forma particular, las áreas de la salud pública y la producción agropecuaria,
consideradas estratégicas para atacar la pobreza y por sustentar el desarrollo y
el crecimiento de la riqueza social, recibieron especial atención. Así se
habrían de tomar medidas que condujeron posteriormente a la creación, en 1930,
del Ministerio de Salubridad, Agricultura y Cría (MSAC), el establecimiento de
sus líneas de trabajo y la contratación para esta instancia gubernamental de
personal profesional extranjero, ante su falta en el país, sobre todo médico
veterinario para conformar una oficina especializada.
La filosofía de trabajo y las acciones llevadas a cabo por este Ministerio
y sus dependencias en los campos de la producción e higiene de alimentos así
como en la salud humana, ambiental y animal, al igual que sus alcances y
logros, evidencian que sus operarios se acercaron a una visión adelantada de lo
que hoy conocemos como One Health, hecho que es detallado y reivindicado en
este trabajo de investigación.
El 19 de diciembre de 1908, el General Juan Vicente Gómez, llega a la Presidencia de la República de Venezuela, dando un giro al manejo ejecutivo del país y promueve sistemáticamente una serie de cambios en el
Estado que buscan su transformación poniendo énfasis en el ordenamiento, la
organización, la infraestructura, las investigaciones y estudios, así como en
la apertura a los adelantos científicos; todo con el propósito de ajustar la
Nación a los nuevos tiempos, signados por ideas y planteamientos de modernismo
y de progreso, promovidas en el país por la que se conoce como segunda
generación positivista venezolana integrada por una serie de prominentes
intelectuales, entre los que destacan: José Gil Fortoul, Pedro Manuel Arcaya,
César Zumeta y Laureano Vallenilla Lanz, que desde muy temprano comienzan a
cerrar filas con el llamado gomecismo.
A partir de 1909, se establecerán contactos con países europeos y con
Estados Unidos de Norteamérica a fin de lograr colaboración en planes y
proyectos que mejoren las condiciones de Venezuela. Ese mismo año, bajo el lema "Unión, Paz y Trabajo", se comienzan a tomar decisiones y acciones que
procuran el avance nacional. En tal sentido, se crea la Dirección de
Agricultura y Cría y Colonización del Ministerio de Fomento con la intención de
aumentar las actividades agropecuarias y aprovechar la gran cantidad de tierras
ociosas.
En 1910 se decretó la creación de las Comisiones Científicas y
Exploradoras de Venezuela con el propósito de realizar estudios en las diversas
regiones del país desde el punto de vista geográfico, hidrográfico,
astronómico, geodésico, geológico, botánico, etnológico, arqueológico y
zoológico, que además debían proceder al estudio y trazado de las vías de
comunicación para conformar un Plan General de las Vías de Transporte de la
República, así como dedicarse a estudios preliminares destinados a proveer de
agua potable y servicio de cloacas a las poblaciones. Se decreta la creación de
un solo Ejército Nacional y una Academia Militar, con el propósito de acabar
con las múltiples guerrillas personales controladas por caudillos regionales y
proveerse de una institución que garantizara la paz nacional. Asimismo, en el
ámbito educativo, a través del Ministerio de Instrucción Pública, se propuso
una reforma y modernización del sistema y se decretó la creación de escuelas de
agricultura, cría y veterinaria, de enfermería, normales y de artes y oficios
para Caracas y otras regiones del país. Más adelante, con la irrupción del
negocio petrolero, se verán otros cambios importantes sociales, políticos,
económicos, y hasta culturales que delinearán a la moderna Venezuela.
Objetivamente
podemos ver cómo, de forma particular, áreas como la educación, la salud
pública y la producción agropecuaria e industrial, consideradas estratégicas
para atacar la pobreza y por sustentar el desarrollo y el crecimiento de la
riqueza social, recibieron su especial atención en la gestión de Gobierno entre
1908 y 1935 del General Juan Vicente Gómez; hecho que a la postre permitió hacer pasar paulatinamente
a Venezuela al siglo XX, lo que para algunos analistas hubiese tardado
muchísimo más al haberse prolongado la condición agropecuaria, latifundista,
belicista, caudillista y errática que caracterizó al país durante la segunda
mitad del siglo XIX.
LA SALUD PÚBLICA COMO ASUNTO DE ESTADO EN EL SIGLO XX
Tras la epidemia de peste bubónica aparecida en Venezuela,
particularmente en el puerto de La Guaira, en 1907 y debido al pobre manejo,
marcadamente muy político y poco técnico, que el Gobierno de Cipriano Castro le
dio al evento, se encendieron alarmas entre los médicos venezolanos e
instituciones como la Academia Nacional de la Medicina, y más allá en la Oficina
Sanitaria Internacional de las Repúblicas Americanas al percibirlo como una
amenaza continental, que se manifestaron por una urgente organización del
sistema sanitario del país. Tal clamor obtuvo respuesta en el nuevo Gobierno del Presidente Gómez, el cual crea en 1909 la Comisión de Higiene Pública, instancia
consultiva, con rango nacional que a su vez tenía órganos similares a nivel
regional y local, de carácter temporal y dependiente del Ministerio de
Relaciones Interiores, ya que en esa época la salud era considerada un problema
de seguridad nacional o de orden público.
Estaba constituida por seis médicos, un ingeniero y un abogado, y
presidida por el galeno barquisimetano Dr. Pablo Acosta Ortiz con el Dr. Luis
Razetti como secretario. El acontecimiento se tiene como un hito importante en
la historia de la salubridad venezolana por ser el primer intento formal de un Gobierno por tomar la salud como asunto de carácter público.
Doctor Pablo Acosta Ortiz.
Esta comisión dio paso en 1910 al Consejo Superior de Higiene y
Salubridad Públicas, dirigido por el Dr. Carlos de la Cabada y a la Dirección
de Higiene y Salubridad Públicas a cargo del Dr. Pablo Acosta Ortiz; órganos
hermanos y coactuantes, el primero de carácter consultivo y el segundo
ejecutivo, de vida efímera y que en la práctica solo sentaron las bases para
que en noviembre de 1911 se creara la Oficina de Sanidad Nacional (OSN), bajo
la responsabilidad directa de la Presidencia de la República y con mandato
fundamental de controlar los frecuentes brotes de enfermedades, como viruela, fiebre
amarilla, peste bubónica, malaria y disentería, que eran comunes tanto en
Caracas como en el interior del país. La Oficina de Sanidad Nacional,
contemplaba un Instituto de Higiene, provisto de laboratorios de Bacteriología,
Parasitología, Química Biológica y Bromatología, y una Oficina Central de
Desinfección, además de una Oficina o Departamento Veterinario, con secciones
de Seroterapia y Vacunación, encargado del estudio y control de enfermedades
que afectaban tradicionalmente a los ganados en el medio rural como la
derrengadera, la peste boba, el carbón, y las parasitosis.
Doctor Luis Razetti.
La Oficina de Sanidad Nacional, tenía unas amplias competencias que
incluían el registro epidemiológico, la vacunación, la desinfección, la lucha
contra ratas, moscas y mosquitos, el saneamiento ambiental, la regularización
de servicios e establecimientos de salud, las construcciones sanitarias, la
inspección de alimentos; los laboratorios de diagnóstico y los servicios de
aguas y aseo urbano.
Doctor Samuel Darío Maldonado.
Como fundador y primer director de la Oficina de
Sanidad Nacional se designó al Dr. Samuel Darío Maldonado, médico, higienista,
antropólogo, escritor, periodista y político, graduado en la Universidad
Central de Venezuela y con especializaciones en Berlín, París y Viena, quien estuvo en el cargo hasta 1914. Venía de ser Ministro
de Instrucción Pública en el primer gabinete del General Gómez entre 1908 y
1910, donde tuvo destacada participación en la propuesta de reformas educativas
para una nueva Venezuela; además de un par de años en el ejercicio privado de
la medicina y la cirugía en diferentes regiones del país y del este de
Colombia. También era un destacado ganadero, propietario del Hato El Frío, una
inmensa finca en los Llanos que otrora fuera del héroe de la Independencia
General José Antonio Páez y que en la década de 1970’s fue importante locación
para la Serie Venezolana del programa televisivo español "El Hombre y su
Mundo" del naturalista Félix Rodríguez de la Fuente. Esta última condición
del nuevo director pesó probablemente en sus acciones en el ámbito ambiental,
médico veterinario y de la salud pública veterinaria en el organismo a su cargo.
En su Mensaje
Presidencial al Congreso Nacional, el 19 de abril de 1912, el Benemérito General
Juan Vicente Gómez expresó:
"Espero que en
las actuales sesiones dispondréis lo conveniente para el establecimiento de la
Granja Modelo. Nuestro país es esencialmente agrícola, criador y minero, y
exige que se le dote de escuelas de agricultura, de veterinaria y de minería.
Se necesita que vengan del extranjero los profesores que hayan de enseñar el
conocimiento de esas ciencias a nuestro inteligente pueblo".
Juan Vicente Gómez
Bajo la dirección y co-redacción del Dr. Samuel Darío Maldonado, en 1912, se promulga la primera
Ley de Sanidad Nacional, su reglamento y una serie de otras normas sanitarias,
las cual ponían énfasis en la organización del sistema de salud pública, el saneamiento
ambiental, la modernización de los acueductos, la construcción de las redes de
cloacas, la pavimentación de las calles, el control de endemias rurales, la
vacunación, así como la inspección técnica de alimentos y bebidas. Esta ley sufrió
modificaciones en 1913, 1919, 1920, 1921 y 1923, ampliándose las áreas de
atención a la Higiene Pública, la Medicina Sanitaria, la Ingeniería Sanitaria y
la Estadística Sanitaria.
El Benemérito General Juan Vicente Gómez, intercambiando
ideas con su gran amigo y colaborador el Doctor José Gil Fortoul.
El Doctor José Gil Fortoul, en la Memoria del Ministerio de Instrucción
Pública correspondiente a 1912, refiriéndose a la proyectada Escuela Federal de
Agricultura, Cría y Veterinaria, decía: "Desde los tiempos mismos de la
fundación de la nacionalidad, es problema presente a los espíritus ilustrados,
la creación de esta enseñanza, cuya falta ha entorpecido y aún comprometido
seriamente el desarrollo de la riqueza pública".
El impulso al desarrollo de las ciencias y sobre todo, la necesidad de
crear las bases para la enseñanza de algunas disciplinas como la agronomía y la
veterinaria, consiguen en el Doctor José Gil Fortoul un aliado importante,
reforzando esa voluntariosa intención con la presencia en el país de Henri
Pittier de quien se conocen ideas para fomentar la agricultura venezolana
sustentadas en la ciencia experimental y en el concepto según el cual la
estación experimental es la base y fundamento de cualquier sistema de
agricultura regional y de la enseñanza profesional en esta materia.
Luego de 1914, en la Oficina de Sanidad Nacional así como en la Oficina
Central de Sanidad Nacional (OCSN), nombre que se le adjudicó en 1918, y en la
Dirección de Sanidad Nacional (DSN), denominada de esa forma desde 1919,
sustituyeron al Dr. Samuel Darío Maldonado los doctores Gumersindo Torres, José Antonio
Tagliaferro Miliani, Luis Gregorio Chacín Itriago, Ricardo Baquero
González, Plácido Daniel Rodríguez Rivero, Santiago Rodríguez R., Juan Vicente
Larralde y Henrique Toledo Trujillo; todos médicos higienistas o sanitaristas
con estudios en el país y en el exterior.
Los cambios de 1919 fueron secuela directa de la pandemia de gripe
española que afectó a Venezuela, que forzó reformas en los organismos, los
recursos y en la actuación en cuanto a la salud pública, repotenciándose el
proceso de modernización de la sanidad nacional.
Henri Pittier.
Por otro lado, en el ámbito agropecuario y ambiental es menester
resaltar la contratación en 1913 del ingeniero, geógrafo, cartógrafo,
meteorólogo botánico, zoólogo, naturalista y conservacionista
suizo-estadounidense Henri Pittier, con el objetivo de que estudiara la
situación agrícola nacional y proponer planes a futuro. Pittier recomienda el
establecimiento de estaciones experimentales y laboratorios para análisis de
suelos, realizar estudios fitopatológicos y de las enfermedades de los
animales domésticos, además de la creación escuelas de enseñanza agropecuaria y
forestal.
En la segunda década del siglo XX, con el avance de la actividad
petrolera, llegan al país compañías concesionarias norteamericanas, entre ellas
la Standard Oil del grupo Rockefeller, quienes enseguida decidieron brindar su apoyo y colaboración en materia de salud, reconociendo los evidentes esfuerzos realizados por el
Gobierno del Presidente Gómez.
En 1924, la Fundación Rockefeller, que ya operaba en Venezuela desde
1916, realizó un estudio con sus expertos acerca de la situación de
enfermedades contagiosas, como la fiebre amarilla, la malaria o la
anquilostomiasis, y sobre los posibles mecanismos para su control. Los
resultados de tal estudio basaron el convenio establecido en 1926 entre el Gobierno venezolano, a través de la Dirección de Sanidad Nacional, y la
División de Sanidad Internacional de la Fundación para mejorar los sistemas de
lucha contra esas enfermedades que incluía el envío de personal calificado
estadounidense incluidos médicos y una misión de ingeniería sanitaria, soporte
en medicamentos y equipos, becas de estudio en el exterior para personal médico
y paramédico venezolano y eventualmente el establecimiento de escuelas de salud
pública y malariología en el país.
Los avances logrados en estas materias forzaron la creación, en 1929, de
la Oficina de Salud Pública en la Dirección de Sanidad Nacional. Una división
encargada específicamente de la salud pública, la caridad pública, las
organizaciones de caridad, la atención en situaciones de catástrofes, los asilos
y hospitales así como de la legislación farmacéutica y médica; siendo designado
como primer director el Dr. David Gimón Jr.
EL MINISTERIO DE SALUBRIDAD, AGRICULTURA Y CRÍA (MSAC)
El Gobierno del Presidente Gómez, en agosto del año 1930, elimina la Dirección de Sanidad
Nacional para dar paso al Ministerio de Salubridad, Agricultura y Cría (MSAC),
despacho que concentró todas las dependencias con competencias relacionadas a
las dos áreas, provenientes tanto del Ministerio de Relaciones Interiores como
de la Presidencia de la República, cumpliendo de esta forma recomendaciones de
la 8ª Conferencia Sanitaria Panamericana celebrada en 1927 que sugería la
existencia de un órgano superior ministerial para esas responsabilidades en
cada país del continente. El Ministerio de Salubridad, Agricultura y Cría, mantuvo todas las estructuras de las unidades
que le dieron forma las cuales se organizaron en dos grandes direcciones, la de
Salubridad Pública y la de Agricultura y Cría.
Fue
a inicios de la década de 1930 y a partir de entonces cuando empezó a emerger
la Medicina Veterinaria en Venezuela, durante el Gobierno del Benemérito General Juan Vicente Gómez.
El Doctor Henrique Toledo Trujillo, designado por el General Juan
Vicente Gómez, Ministro de Salubridad, Agricultura y Cría.
Como Ministro de Salubridad, Agricultura y Cría fue designado el Dr. Henrique Toledo Trujillo,
quien había estado hasta ese momento a la cabeza de la Dirección de Sanidad Nacional; cirujano, urólogo y
ortopedista, médico particular del Presidente Gómez, con estudios de especialización en
París, y casualmente con inclinación hacia la atención de animales, por ser
amante del hipismo y criador de caballos. Detentará este cargo durante el lustro
y medio de vida efectiva del Ministerio, hasta finales de 1935. En su gestión,
se inauguró el Servicio de Higiene Escolar, se pone en marcha la Escuela de Expertos
Agropecuarios y Prácticos en Sanidad Animal, se moderniza el servicio del aseo
urbano de Caracas y en las principales ciudades del interior del país, se funda
el Laboratorio de Fisioterapia y Radiología, se promulga la ley de Defensa Sanitaria
Vegetal y Animal, se reorganiza la Oficina Veterinaria, se crea el Sanatorio
Antituberculoso Simón Bolívar, se crearon los servicios de desinfección y eliminación
de ratas, se auspicia la organización de la I Conferencia Sanitaria Nacional
que tuvo como tema básico la anquilostomiasis, y se establecen los turnos farmacéuticos
en Caracas y en el resto del país.
Para la antigua Oficina Veterinaria, ahora adscrita a la Dirección de
Agricultura y Cría del MSAC, se contrató, a través de la Oficina de
Cooperación Agrícola de la Unión Panamericana, a los médicos veterinarios
Vladimir Kubes, checoslovaco, Emilio Graña y Fernando Roumiguiere, argentinos, Carlos
Otto, chileno y posteriormente al uruguayo Enrique Vogelsang; a quienes los
historiógrafos de la medicina veterinaria venezolana consideran como los
pioneros de la implantación formal de la profesión en el país.
Al Dr. Kubes se le instaló al frente de la Oficina Veterinaria con la
misión de encargarse de los programas de enseñanza de la profesión y de manejo,
cuidado, higiene, sanidad, multiplicación, cría y alimentación de animales así
como del aprovechamiento de sus productos. Junto a su equipo de trabajo se
desempeñaron no solo como clínicos de campo, sino también como educadores y
consejeros de los ganaderos en la tarea de combatir las enfermedades de los
rebaños, asesores en la construcción de instalaciones sanitarias y productivas,
agentes desparasitadores y vacunadores, y finalmente promotores de la salud
ambiental así como de la higiene y la prevención de enfermedades en los
pobladores rurales.
El Dr. Vladimir Kubes coordinó el desarrollo del Primer Curso de Prácticos
de Sanidad Animal según Decreto del Presidente Juan Vicente Gómez, el 2 de enero
de 1934. El Dr. Kubes impregnó al proceso formativo de pertinencia social
afrontando la crisis ganadera con métodos científicos para contribuir en la
solución de los problemas.
El Dr. Kubes no solamente fue pionero o fundador sino el líder de los
estudios de Prácticos de Sanidad Animal, que tendrían como consecuencia la
organización e implementación de los estudios de Medicina Veterinaria en el
país, tal como se consagra en el artículo primero de la Ley de Ejercicio de la
Medicina Veterinaria al reconocer como Médicos Veterinarios a las personas que
obtuvieron el diploma de "Prácticos en Sanidad Animal" o de Expertos
en Veterinaria y Zootecnia, dándole carácter legal y profesional a la
iniciativa que naciera, el 2 de Enero de 1934, durante la presidencia del General
Juan Vicente Gómez. Esta Ley establece:
"El ejercicio de la medicina veterinaria se regirá por la presente
Ley y su reglamento, los reglamentos internos y las normas de ética profesional
que dictare el Colegio de Médicos Veterinarios. Las personas que hayan obtenido
diploma de "Prácticos en Sanidad Animal" o de "Expertos de
Veterinaria y Zootecnia" de conformidad con las leyes anteriores, quedarán
igualmente sometidos a dichas disposiciones en cuanto les sean aplicables".
Este curso culminó el 20 de Diciembre de 1934 con
nueve personas graduadas y cuatro de ellos becados por el Gobierno Nacional
para continuar estudios de Medicina Veterinaria en Uruguay.
El ingreso de los estudiantes a este tipo de cursos fue promocionado por
una política de becas otorgadas por el Gobierno del Benemérito General Juan
Vicente Gómez, Presidente de la República de Venezuela.
BECADOS POR EL GOBIERNO NACIONAL DEL GENERAL GÓMEZ
Se embarcaron para el Uruguay los bachilleres Gustavo Rivas Larralde,
Víctor Delgado Vivas, Paulo Llamozas González y Doctor Alberto Baumeister,
cuatro de los alumnos que obtuvieron más altas calificaciones en el primer
curso de Prácticos en Sanidad Animal que efectuó el Ministerio de Salubridad,
Agricultura y Cría durante el año pasado.
El mentado Ministerio en cumplimiento de un Decreto Presidencial emitido
por el Benemérito General Juan Vicente Gómez, envía a estos destacados alumnos
a la capital uruguaya con el laudable fin de que amplíen sus conocimientos en
tan avanzado centro de estudios de Medicina Veterinaria y se perfeccionen para
su ejercicio profesional.
(Publicado en la Revista "Élite", el 26 de enero de 1935).
El trabajo de investigación científica realizado por
Marc Bloch es un histórico documental que se encarga de analizar las diferentes
formas de la historia de la medicina veterinaria en Venezuela, tomando como
punto de partida 1934, fecha de instauración oficial de la medicina veterinaria
en este país, durante la presidencia del Benemérito General Juan Vicente Gómez.
Gracias a esta investigación se dio a conocer un importante número de trabajos
para el futuro Médico Veterinario.
CONSIDERACIONES FINALES
En este repaso histórico evidenciamos durante los inicios de la organización
sanitaria venezolana, en las tres y media primeras décadas del siglo XX, cómo
la sanidad humana, la ambiental y la animal forman aparentemente un complejo indivisible, en la práctica atendido en conjunto para garantizar la salud en cada uno de
sus tres elementos. Hecho que se aprecia tanto en la decisión de crear un Departamento
Veterinario en una Oficina de Sanidad Nacional, caso similar al que en
nuestros días podemos observar por ejemplo en el sistema sanitario italiano,
como en la creación de un Ministerio de Salubridad, Agricultura y Cría, lo que
es inusual en el concierto mundial.
Consideramos que los operarios técnicos y políticos venezolanos
involucrados en tales decisiones se acercaron a una visión adelantada de lo que
hoy conocemos como One Health, una iniciativa de integración de las ciencias
biomédicas para un trabajo mancomunado, en el espíritu del concepto de One
Medicine propuesto por Schwabe en 1964, que pretende regir como paradigma la
actuación de las profesiones médicas en la actualidad y que busca en definitiva
la anhelada supervivencia en la tierra.
Las bases filosóficas o teóricas que sustentaron tal visión son de
relevante interés y debieran ser esclarecidas, ya que, en virtud de que en su
momento produjeron sus alcances y logros importantes, pueden servir de sustento
a nuevas ideas, adaptadas al contexto social, político y cultural venezolano,
destinadas a optimizar hoy la sanidad nacional.
(Extractos tomados del libro "Historia de la
Veterinaria", presentado por Naudy Trujillo Mascia
y Milva Javitt Jiménez en el XXIV Congreso Nacional y XV Congreso Iberoamericano
de Veterinaria realizado en Almería, España, del 26 al 28 de octubre de 2018).