domingo, 12 de noviembre de 2017

EL GENERAL GÓMEZ Y SU GRAN AFICIÓN POR EL CINE



El 4 de diciembre de 1932, "The New York Times" publicó en primera página un despacho enviado desde Caracas, el 27 de noviembre por su corresponsal especial. Su título señalaba lo siguiente:



GÓMEZ A MOVIE FAN; SEES 340 ANNUALLY; President of Venezuela Rarely Fails to End Work Day With a Picture. PREFERS AMERICAN FILMS Takes Projection Machine With Him When He Goes on Trips Through Country.

Special Correspondence, THE NEW YORK TIMES.
December 04, 1932. Section WEEK END CABLES FOREIGN CORRESPONDENCE WATCH TOWER LETTERS TO EDITOR, Page E7, Column, words.
        
Traducción del texto, publicado en "The New York Times":

“El General Juan Vicente Gómez, Presidente de Venezuela, ha sido declarado por representantes de la industria cinematográfica de Estados Unidos como "The world’s greatest movie fan". Es decir, el aficionado al cine más grande del mundo. Gómez ve 340 películas al año, prácticamente la producción anual.

El General se levanta a diario a las 5:00 de la mañana, y raramente pasa un día sin completar su jornada viendo una película, preferiblemente norteamericana.

Este hombre tiene preferencias por Laurel y Hardy, algo no compartido por los venezolanos, que mayoritariamente se inclinan por los dramas y disfrutan de los gritos desesperados. Buster Keaton y Harold Lloyd figuran entre sus favoritos, al igual que Douglas Fairbanks. Las películas de vaqueros lo entusiasman.
  
Laurel y Hardy, Buster Keaton, Harold Lloyd, Douglas Fairbanks y las películas de vaqueros como las protagonizadas por John Wayne eran las favoritas del General Gómez.

Las películas constituyen la primera fuente de recreación del General Gómez, pero lo que le interesa más del cine es su valor educacional. A través de las películas estudia la cultura y, lo que es más importante, el progreso físico de los otros países. Nunca ha viajado fuera de Venezuela, con excepción de los siete años que pasó en Colombia por defender un gobierno constitucional derrotado por una revolución.

Gómez siente predilección por las películas que describen las grandes construcciones, puentes, carreteras, diques, aquello que le sirve de modelo o inspiración para el desarrollo de su país.

Observando el film "The Flying Fleet" (1928) de Ramón Novarro, noté la gran atención que puso el General en las escenas de vuelo. “Ah, qué instrumentos tan finos tienen los norteamericanos para volar”, exclamó con gran entusiasmo. ¡Maravillas del cine mudo para el General!

Ramón Novarro en el film “The Flying Fleet” (1928).

Gómez divide su tiempo entre la capital de la República y la del Estado Aragua. En el Palacio de Miraflores hizo instalar un proyector con sonido en el salón comedor, y cada tarde, luego de una cena frugal que coincide con la visita de sus familiares, ve una de las más recientes películas. En Aragua asiste al Teatro Maracay. Cuando viaja, podía faltar todo, menos el proyector.

El hermoso Teatro de Maracay (Venezuela) en donde solía disfrutar el General Juan Vicente Gómez, frecuentemente, la proyección de numerosas películas.

Gómez utiliza el cine para comprobar cómo marchan las obras públicas en las diversas partes del país, y también envía a los camarógrafos a sus haciendas para ver cómo anda el ganado y si son verdad los informes que le reportan los administradores”. 

(Traducción del artículo: “Juan Vicente Gómez, the world’s greatest movie fan”, publicado en "The New York Times", el 4 de diciembre de 1932).

Pueden disfrutar un corto video sobre el Teatro Ateneo de Maracay con anécdotas del Cine en la época del Presidente Gómez, narradas por nuestro Simón Díaz: