jueves, 25 de abril de 2019

ENTREVISTA EN ESPAÑA AL DR. VICTORINO MÁRQUEZ BUSTILLOS SOBRE EL GENERAL GÓMEZ EN 1926

Té de honor al Ex Presidente de la República de Venezuela, Excmo. Sr. Dr. Victorino Márquez Bustillos, por nuestro Ministro en aquella República, Don Ángel de Ranero y Rivas. (Foto: Alfonso).

Tengo fe absoluta en los grandes destinos de Venezuela y en su definitivo engrandecimiento. Cimento y afirmo esta creencia en las enormes riquezas de todo orden y en las poderosas energías del país, administradas hoy y regidas rectamente, sabiamente, por la mano y el corazón de un hombre genial: el General Juan Vicente Gómez.

HISPANOAMERICANISMO
Publicado en "La Ilustración Mundial" de España

En el té de honor ofrecido en Madrid al Ilustre Ex Presidente de la República de los Estados Unidos de Venezuela, Dr. Victorino Márquez Bustillos, por nuestro Ministro en aquella República, don Ángel de Ranero y Rivas, se nos presentó la ocasión de departir unos momentos en agradable conversación con el recto magistrado venezolano acerca de su viaje a España y de la política de saneamiento y prosperidad de su país bajo la presidencia del Benemérito General Don Juan Vicente Gómez.

Por haber vivido en Venezuela y haber disfrutado de la tranquilidad que se desprende de una sabia y recta administración, nuestra charla fue, ante todo, una expansión espiritual, nacida al calor del entusiasmo encarnado en la figura de su Presidente.

Señalaba el Dr. Victorino Márquez Bustillos: 

"Para usted, que ha estado en mi país, me dice, y conoce el entrañable cariño que siento por el General Juan Vicente Gómez, del que soy su más fiel colaborador, nada nuevo he de manifestarle; mas Europa entera debe conocer esa transformación, que señalábamos, operada en Venezuela.

Mi viaje es exclusivamente de recreo, y su itinerario responde al deseo de conocer las principales poblaciones españolas especialmente aquellas que tienen alguna relación histórica, comercial o de otro orden con Venezuela.

Ocupé la Presidencia de mi país desde el año 1914 a 1922, en que resigné el poder en manos del actual Presidente, Señor General Juan Vicente Gómez. El General Gómez es el autor y sostenedor de la paz y la prosperidad del país. Hubo un momento en que el desorden político y administrativo reclamó la presencia de un hombre capaz de encauzar las actividades nacionales. Este hombre fue el General Gómez, que ha correspondido a la confianza y esperanzas de la nación con la máxima eficacia. 

Decidido colaborador del General Gómez y su leal partidario, ajusté mis actos de magistrado a los de mi amigo y jefe del actual Presidente. Y esto por dos razones principalísimas: por la anterior expuesta de amistad y partidarismo y por la no menos importante de haberse conquistado ya el General Gómez, para la época de mi presidencia, la absoluta confianza del pueblo, por sus limpias y acertadas ejecutorias de gobernante. Efectivamente, el consejo del ilustre caudillo resolvió muchas veces situaciones difíciles, como la creada por la guerra europea, en que el General Gómez indicó el de la neutralidad como el mejor camino a seguir, indicación salvadora, que no sólo evitó grandes males al país, sino que le mantuvo en condiciones de poder resistir sin quebrantos y aun con insospechadas ventajas la crisis económica mundial.

De no haber coincidido mi llegada a Madrid con el viaje a Londres de S. M. el Rey le habría cumplimentado, y hubiera aprovechado la entrevista para significar a Don Alfonso que en Venezuela se le admira y quiere y se anhela unánimemente su visita. He visitado al infante Don Fernando, con quien departí, en términos cordiales, de España y Venezuela. Deseaba yo expresar personalmente a Su Alteza mi agradecimiento por sus gestiones para que se me fuese concedida la Gran Cruz de Alfonso XII, condecoración de las más altas entre las que poseo, y con la que me honró el Gobierno de Su Majestad en 1921. Quiero hacer constar mi agradecimiento al Excmo. Sr. D. Ángel de Ranero y Rivas, Ministro de España en Venezuela; a nuestro Encargado de Negocios en el Reino y  a los cónsules venezolanos en Santander, Bilbao, San Sebastián y Madrid, quienes han extremado conmigo su amabilidad y cortesía.

Tengo fe absoluta en los grandes destinos de Venezuela y en su definitivo engrandecimiento. Cimento y afirmo esta creencia en las enormes riquezas de todo orden y en las poderosas energías del país, administradas hoy y regidas rectamente, sabiamente, por la mano y el corazón de un hombre genial: el General Juan Vicente Gómez".

Entre las personalidades que asistieron figuraban el Excmo. Sr. Conde de Vallellano, Alcalde de Madrid; Excmo. Sr. D. Alberto Urbaneja, Encargado de Negocios de Venezuela; Don Ángel de Ranero y Rivas, Excmo. Ministro de España en Venezuela, Excmo. Sr. D. Emilio Palacios, Embajador de España en la República Argentina, y señora; Sr. Gutiérrez Betancourt, Cónsul de Venezuela en Santander; Sr. Ramírez de Montesinos, Jefe del Gabinete Diplomático del Ministerio de Estado; Excmo. Sr. Conde Santa Pola, Secretario Diplomático del Ministro de Estado, y señora; D. Juan Felipe Ranero, Secretario Diplomático del Ministro de Estado; Excmo. Sr. Conde de San Javier; Excmos. Sres. Marqueses de Unza del Valle: señorita María Perales, Concejal del Ayuntamiento de Madrid, familia de Oliva; Sres. de Escudero; familia de D. Casimiro Vega; D. Enrique Marín, autor del monumento a Bolívar en Madrid; D. Antonio Serra Cañameras y los arquitectos D. Alberto Palacios y D. Luis S. de los Terreros.

(Publicado en "La Ilustración Mundial" de España, el 15 de julio de 1926).