viernes, 7 de mayo de 2021

LA MADRE MARĺA DE SAN JOSÉ PRIMERA BEATA DE VENEZUELA

 (Por: Rafael Dupouy Gómez)


Beata Madre María de San José.

Laura Evangelista Alvarado Cardozo, conocida como la Madre María de San José, o sencillamente como Madre María, nació en Choroní, Estado Aragua, el 25 de abril de 1875 y falleció en la ciudad de Maracay, el 2 de abril de 1967. Religiosa, fundadora de la congregación de las Hermanas Agustinas Recoletas del Corazón de Jesús. Por su enorme bondad y destacada labor cristiana, se convirtió, el 7 de mayo de 1995, en la primera Beata de Venezuela, considerada por la Iglesia Católica, privilegio que comparte con la Madre Candelaria de San José, Carmen Rendiles Martínez y el Doctor José Gregorio Hernández.

María de San José era hija del Coronel Clemente Alvarado y de Margarita Cardozo, de quien heredó su amor ferviente a Cristo y la Eucaristía. Inició sus estudios en su pueblo natal, pero a muy temprana edad se mudó con su familia a Maracay, donde terminaría sus estudios. A los 13 años de edad, el 8 de diciembre de 1888, recibió su Primera Comunión, haciendo sus primeros votos. Desde aquel entonces comenzaría su vida religiosa. Antes de cumplir 18 años, se dedicó a la preparación de niños y niñas que iban a realizar su Primera Comunión.

PREPARÓ PARA LA PRIMERA COMUNIÓN A LOS HIJOS DEL GENERAL GÓMEZ 

La Madre María de San José, preparó para la Primera Comunión a los hijos del Presidente de la República, General Juan Vicente Gómez, los niños: Juan Vicente, Florencio Antonio, Rosa Amelia y Belén María Gómez Núnez de Cáceres, quienes aparecen en la foto, el 16 de julio de 1919, en la ciudad de Maracay. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

Recordaba con mucha alegría y orgullo mi abuelo Florencio Gómez Núñez, hijo del Benemérito General Juan Vicente Gómez, Presidente de la República de Venezuela, lo siguiente:

"A la Madre María de San José, la conocimos nosotros en Maracay, era la fundadora de la Congregación de las Hermanas Agustinas Recoletas de los Pobres, el Asilo de Huérfanos. Con ella tuvimos un mayor contacto desde niños y mamá, Dolores Amelia Núñez de Cáceres, la quería muchísimo, a tal punto que cuando fuimos a hacer la Primera Comunión, la Madre María fue la que nos preparó a mi hermano Juan Vicente, a mis hermanas Rosa Amelia y Belén María, y a mí, para que nosotros cuatro hiciéramos la Primera Comunión juntos, el 16 de julio de 1919, en la ciudad de Maracay. Luego de celebrada la ceremonia, la Madre María de San José, me obsequió una tarjeta de recuerdo con un hermoso escrito de puño y letra suyo, que todavía conservo y dice muy cariñosamente:

"Al buen niño Florencio A. en el dichoso día de su Primera Comunión: Que el Dios tres veces santo que habéis recibido por vez primera en vuestro corazón fortifique vuestra alma y la haga muy santa y pura".

Madre María

Recuerdo de su Primera Comunión al niño Florencio Gómez Núñez, hijo del General Juan Vicente Gómez. Escrito por la Madre María de San José, en 1919. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

Florencio Gómez Núñez, recordando con especial cariño a la Beata Madre María de San José. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).

Mi papá, el General Juan Vicente Gómez, Presidente de la República de Venezuela, admiró la bondad, capacidad de trabajo y la gran labor a favor de los pobres, enfermos y necesitados que hacía la Madre María de San José. En varias oportunidades le brindó ayuda económica a ella y a las Hermanas Agustinas Recoletas en suministros y también para reparar el Asilo de Huérfanos.

Los muebles para el Asilo de Huérfanos, mi mamá, Dolores Amelia Núñez de Cáceres, se los facilitaba a la Madre María. Muebles que pertenecían a la misma casa de nosotros, se los mandaba de regalo. Mi mamá y nosotros sentíamos un gran cariño y admiración por la Madre María de San José y siempre mantuvimos su amistad.

Cuando la Madre María de San José muere en Maracay, en el año de 1967, estando yo aquí en Caracas, salí enseguida para Maracay para estar presente en el entierro. La Madre María fue enterrada en la misma Capilla de las Hermanas Agustinas Recoletas de Maracay. Yo le tengo una gran devoción, ahora que la van a beatificar y siempre que puedo le pido a ella, al Doctor José Gregorio Hernández, a la Virgen del Carmen, a María Auxiliadora, la Virgen del Colegio Salesiano donde yo estudié cinco años en el Colegio Don Bosco de Valencia y al Corazón de Jesús".

Florencio Gómez Núñez.

(Entrevista realizada por: Hnos. Dupouy Gómez. Año 1994).

Ofrenda Floral de las Hermanas Agustinas Recoletas del Corazón de Jesús al Benemérito General Juan Vicente Gómez, en reconocimiento como gran benefactor de la Madre María de San José en su cristiana y noble misión por los pobres, huérfanos y enfermos de Venezuela. Maracay. Año 1998. (Archivo: Hnos. Dupouy Gómez).       

El 17 de Mayo de 1925, celebró la Madre María de San José una fiesta importante para la Iglesia Católica. Teresita del Niño Jesús, para aquel momento beata, era canonizada y la Madre María escribió muy emocionadamente:

"¡Solemne día de la canonización de Santa Teresita del Niño Jesús! No sé cómo expresar lo que hoy me pasó:

Sí, la querida Santita me concedió el gran beneficio de DEJARME ASPIRAR UN GRAN PERFUME.

No sé puede hablar de esto, no sé hablar, Jesús mío; lo que yo experimenté hoy, es muy grande: Parecióme que un frasco de esencias puras de nardo, se había roto a mi lado...".

Madre María de San José 

La veneración a la nueva Santa venía desde hacía tiempo. Al día siguiente, el 18 de mayo de 1925, la Congregación celebró la primera Misa en honor a Santa Teresita. En esta oportunidad la Madre María escribió:

"Hoy mismo nos hizo el gran milagro de que el General Gómez aceptara el presupuesto, que nuestro buen Padre Cabrera le presentara, y dio para reparar el Asilo.

¡Estupendo milagro! Gracias, Jesús mío, que por nuestra Santita, nos concedes gracias tan grandes.

Oh querida Santita mía, concededme una gracia sobre todas las gracias:

MI CONVERSIÓN Y QUE EL PRIMER ANIVERSARIO DE VUESTRA CANONIZACIÓN, LO VAYA A CELEBRAR CON VOS EN EL CIELO!!!

Madre María de San José

OTROS ASPECTOS DE SU BIOGRAFÍA

En 1892, a los 17 años de edad, le imponen el santo escapulario de la Virgen del Carmen. Luego en 1893, junto al sacerdote Justo Vicente López Aveledo, fundó la Sociedad de las Hijas de María y Laura, pasando a formar parte de ella, renovando así sus primeros votos.

Desde muy joven trabajó como voluntaria en hospitales, cosa que haría durante casi toda su vida y de donde obtuvo el nombre con el que se la conoce. Antes de que falleciera su padre, pidió a Dios que él recibiera la extremaunción y contrajera matrimonio con su madre, pues no estaban casados. Don Clemente accedió a estos sacramentos y su hija Laura, en respuesta a la gracia concedida por Dios, prometió guardar ayuno perpetuo, el cual duró diez años, hasta que el padre Vicente López se lo dispensó.

Entre los años de 1897 y 1898, empezó a trabajar voluntariamente como Hermana hospitalaria en el Hospital San José en Maracay, Estado Aragua, que había sido fundado por el presbítero Vicente López. La joven tenía entonces 22 años de edad. De ahí en adelante, asesorada por su director espiritual el Padre López Aveledo, se dedicó al servicio de los más pobres. Próxima a cumplir sus 24 años, en 1899, Laura recibió del padre López la dirección y administración del Hospital.

En 1900 por su gran trabajo en dicho lugar junto con otras Hermanas voluntarias que desempeñaron el mismo papel, fue consagrada como Hermana Hospitalaria Agustina, adoptando el nombre de Sor María de San José. En 1901, fundó igualmente el padre López Aveledo, la congregación religiosa de las Agustinas Recoletas en Venezuela, entrando a formar parte de ella y a cuya cabeza ingresa Laura Evangelista en 1903 como superiora de la comunidad.

La Madre María de San José, trabajó en muchos centros de salud en el país, en Maracaibo, Caracas, Coro y Ciudad Bolívar, entre otros. Incluyendo nuevos hospitales que abrían. Durante mucho tiempo de su vida, la madre se dedicó a cuidar enfermos.

En el año 1901, la Madre María fundó el Instituto Agustiniano Casa Hogar "Doctor Gualdrón" y el 2 de septiembre de 1945, en este mismo lugar, fundó la U.E. Instituto "Madre María", el cual después de su muerte, fue cedido a la Arquidiócesis de Barquisimeto por su congregación.

Junto a su director espiritual, el sacerdote Justo Vicente López Aveledo y cuatro laicas, fundó con aprobación papal de San Pío X, la congregación Hermanas Agustinas Recoletas del Corazón de Jesús, siendo ella su primera Superiora General. Dicha congregación, tiene el objetivo de ayudar a las niñas abandonadas, y ancianos pobres.

Luego de una larga y activa vida, llena de grandes labores y deseo de ayudar a sus prójimos, el 2 de abril de 1967, sufrió una trombosis. Consciente que faltaba poco para su muerte, pidió que se le concediera la posibilidad de que su cuerpo fuera enterrado en la capilla del Asilo Inmaculada Concepción.

La Madre María de San José, falleció en el Hogar Inmaculada Concepción, en Maracay, a la edad de 91 años.

BEATIFICACIÓN

Emotivo e histórico momento de la beatificación de la Madre María de San José, la segunda de izquierda a derecha, en la ciudad del Vaticano, Roma, el 7 de mayo de 1995.

El proceso de su beatificación comenzó en 1978. En 1982, ocurrió la curación de la Hermana Teresa Silva, inválida por una penosa enfermedad, a quien la Madre le había profetizado su curación años antes. Este milagro fue aprobado por decreto papal de Juan Pablo II en 1993.

En 1994, fue trasladado su cuerpo incorrupto al sarcófago de cristal para la veneración de sus hijas espirituales y fieles.

El cuerpo incorrupto de la Beata Madre María de San José.

Hermanas Agustinas Recoletas del Corazón de Jesús, observando el cuerpo incorrupto de su fundadora, la Beata Madre María de San José.

El 7 de mayo de 1995, fue celebrada en la ciudad del Vaticano la ceremonia de su beatificación, llenando de profunda alegría a todos los venezolanos.

¡Viva la Beata Madre María de San José!

Rafael Dupouy Gómez