lunes, 3 de mayo de 2021

LA CONSTRUCCIÓN DEL ACUEDUCTO DE LA GUAIRA EN 1920

 

El Acueducto de La Guaira, Venezuela, gran obra modernizadora decretada por orden del Benemérito General Juan Vicente Gómez, bajo la sabia dirección del eminente doctor Luis Vélez, Ministro de Obras Públicas. 

Dentro de poco tendrá La Guaira una magnífica obra de urgente necesidad como lo es el Acueducto, debido a esta era de progreso efectivo de la Causa Decembrina que preside el Benemérito General Juan Vicente Gómez.

La Guaira, 30 de mayo de 1920. Hace ya algunos meses que dimos cuenta a los lectores de El Nuevo Diario del trazado general y de la construcción del Acueducto de La Guaira, esta excelente obra con que el Gobierno Nacional del Benemérito General Juan Vicente Gómez, está dotando al Primer Puerto de la República; queremos ahora dar algunos pormenores del estanque que se está construyendo, pronto ya a terminar, para la distribución de agua en la ciudad.

LOCACIÓN. El estanque que está situado hacia el S. E. del antiguo Circo de Toros y a 64 metros de distancia centro del circo o centro del estanque, en el mismo estribo de la serranía en que están La Vigía, Las Lagunitas, San Agustín, San Carlos y Chacón, estribo por donde viene la tubería de 3’’ de diámetro, que surtirá al estanque con las aguas de “Río Grande”.

La altura de su brocal es de 49 m. 25 y la de su fondo de 46 m. 75 sobre el nivel del mar.

CAPACIDAD. Cada uno de los dos comportamientos en que está dividido el estanque, tienen 16 m. 33 en el sentido N. S. 12 m. 25 en el E. O. y 2 m. 50 de profundidad, de manera que la capacidad total es de 1.000 metros cúbicos. El acueducto que sirve hoy a La Guaira y que toma íntegras las aguas del Río Osorio, tiene un depósito de 10,85 m. 403.

CONSTRUCCIÓN. Se ha hecho la construcción, mitad bajo tierra, mitad en elevación. El terreno es compacto, compuesto de arcilla y bloques grandes de piedra, lo que hizo que el costo del banqueo de la fosa fuera algo elevado, pues no se pudo tirar sino muy pocos barrenos de pólvora y esto mismo con gran precaución, por la vecindad de habitaciones.

El fondo está revestido con una capa de concreto de 0,20 de espesor, las paredes son también de concreto; en el interior del estanque hay 35 pilares que, junto con el muro divisorio que es de concreto armado, soportarán las vigas de cemento armado y la losa del mismo material que servirá de cubierta al estanque.

Anexo a este gran estanque está ya construido uno pequeño que recibirá el agua de Río Grande y servirá de aforador y desarenador; también está ya listo el departamento para llaves; en este sitio se reúnen en uno solo los tubos de 6’’ de diámetro que salen de cada uno de los compartimientos del gran estanque; pasan también por él los tubos de 8’’ que servirán para la limpieza y un tubo de 4’’ para la limpieza del estanque receptor-desarenador.

El gran estanque tiene sus vertidores (2) lo mismo que el pequeño; todos estos desagües se juntan con los de 8’’ de limpieza y pasan al Río Osorio por una tubería de concreto de 0,50 de diámetro y 150 metros de largo.

En la semana próxima pasada quedó colocada la tubería matriz que es de 6’’ de diámetro (0,15) entre el estanque y la esquina de El León.

Para terminar esta breve reseña es bueno recordar que el agua, después de captada en el río, pasa por un purificador y un filtro, y que luego viene por canalejas de concreto y de hierro perfectamente tapadas. Llega, pues, en buenas condiciones al gran estanque de distribución, cuya construcción muy adelantada ya, motiva estas líneas.

La ejecución de estos trabajos ha sido confiada al experto ingeniero doctor Santiago Aguerrevere, quien ya ha demostrado su competencia en otras obras de la magnitud de la presente.

Dentro de poco tendrá La Guaira una magnífica obra de urgente necesidad como lo es el Acueducto de que nos ocupamos, debido a esta era de progreso efectivo de la Causa Decembrina que preside el Benemérito General Juan Vicente Gómez.

Sean nuestros parabienes al incansable Ministro de Obras Públicas doctor Luis Vélez, quien personalmente atiende con su gran inteligencia, efectiva ilustración y carácter tesonero a la suprema dirección de todas las obras públicas del país.

(Publicado en el Periódico “El Nuevo Diario”, el 2 de junio de 1920).