Doctor Francisco Baptista Galindo, Ministro de Relaciones Interiores del
Benemérito General Juan Vicente Gómez, Presidente de la República de Venezuela.
Hemos recibido un ejemplar de la Memoria de Relaciones Interiores, presentada
a la consideración del Congreso Nacional por el Ministro del ramo, doctor
Francisco Baptista Galindo. Resalta de su lectura la estricta regularidad de la
Nación en todos los órdenes de la vida republicana, bajo la dirección personal,
enérgica y eficaz del General Juan Vicente Gómez, quien llamado nuevamente por
el voto unánime del pueblo venezolano a la más alta dirección de sus destinos, ha
consagrado sus esfuerzos a organizar la Administración, continuando con celo
patriótico la tarea que se impuso desde el memorable 19 de diciembre de 1908.
Su programa político conocido ya de todos por sus fecundos resultados en
la marcha ascendente y progresiva de la Nación, ha continuado cumpliéndose
armoniosamente sobre los cimientos inconmovibles de la paz pública, que es el
supremo bien de los venezolanos.
El doctor Baptista Galindo, al respeto de nuestras instituciones legales, es el telegrama dirigido por el General Gómez a los Presidentes de Estados, ordenándoles se siguiera el sumario correspondiente a los escasos perturbadores del orden público, acusados por la vindicta pública de crímenes y desafueros caídos todos en la jurisdicción del Código Penal. El General Gómez ha dado con esta medida un nuevo basamento a la paz, sin la cual serían vanas e ilusorias las conquistas realizadas por la Causa de la Rehabilitación, que han colocado a Venezuela en un puesto honrosos entre las naciones de la América.
El doctor
Baptista Galindo explanó este trascendental documento en telegrama de fecha 9
de diciembre de 1922 y al referirse a él en su Exposición, escribe
acertadamente que el fin perseguido por el General Gómez no es otro "sino
que las Leyes tengan estricta aplicación como fundamento primordial de su
política de Paz y Trabajo, trazado definitivamente para el porvenir, con la
autoridad moral que es la fuerza de su propia personalidad, el derrotero que
debemos seguir si queremos ver desterrados los males que venían minando el orden
público, las garantías del ciudadano y la majestad misma de las
instituciones".
Los demás asuntos a que se refiere la Memoria, acusan en sus
resoluciones un gran espíritu de equidad, y recomiendan al aplauso la buena
marcha de las oficinas dependientes del Ministerio. Se han expedido en el año
numerosas cartas de nacionalidad, a extranjeros atraídos por el progreso y las
garantías que brinda la Nación; se han conmemorado solemnemente los grandes
días de la Patria, distribuido meritorias recompensas y velado por la
integridad de la Justicia. Fueron obtenidos para la Nación y puestos bajo la
custodia del Archivo Nacional, importantes documentos relacionados con los
fastos de la Independencia, y se han mantenido incólumes las disposiciones de
la Ley de Patronato Eclesiástico.
Tal es, a grandes rasgos, la labor realizada al frente del Despacho de
Relaciones Interiores por el doctor Baptista Galindo, a quien nos complace
enviar nuestras más cordiales felicitaciones.
(Publicado en el Periódico "El Nuevo Diario", el 25 de mayo de
1923).